
Sabemos que durante el embarazo se recomienda evitar ciertas comidas, como el pescado crudo. Sin embargo, también existen productos que son muy beneficiosos para la salud del bebé y de la madre.
Durante el embarazo la alimentación juega un papel fundamental. De hecho, los expertos aconsejan evitar ciertas comidas, entre las que se incluyen el huevo y el pescado crudo, quesos y lácteos sin pasteurizar, carnes crudas o poco cocidas o embutidos, entre otros. Cuando comienza esta etapa puede que pienses que tu dieta ha quedado muy reducida, pero lo cierto es que existen otras comidas que además de saludables pueden disminuir el peligro de perder al bebé. Además, podrás encontrar estos productos en cualquier supermercado de España.
Todo el mundo debería seguir una dieta equilibrada, aunque en el embarazo se convierte en algo primordial. Hoy en día hay muchas dudas sobre el tipo de alimentación que se debe seguir durante estos meses. Estudios recientes han demostrado que hay alimentos concretos muy beneficiosos, que llegan incluso a reducir el riesgo de sufrir un aborto. Cabe recordar que el aborto espontáneo afecta a un 15% de las gestaciones según la Revista Sanitaria de Investigación. Por ello, hablaremos sobre cómo evitar este mal que afecta a tantas mujeres.
¿Cómo disminuye el riesgo de aborto?
Tal y como ha revelado un estudio publicado en la revista JAMA Network Open, en las mujeres que siguen ciertas pautas en su dieta se reduce el riesgo de aborto entre el 13% y 15%. Hablamos de una alimentación conocida como dieta AHA, siglas que corresponden a la asociación que la planteó: Asociación Americana del Corazón (American Heart Association). Ahora la pregunta es, ¿qué alimentos incluye esta dieta?
Entre otras comidas, este régimen se caracteriza por priorizar la ingesta de frutas, verduras, cereales integrales, nueces, legumbres, pescado y mariscos. Asimismo, establece que se debe limitar el consumo de bebidas azucaradas, sodio, carne procesada y grasas saturadas. En definitiva, los resultados de la investigación muestran que se debe seguir una dieta variada y equilibrada, puntualizando en la ingesta de alimentos ricos en omega-3, ya que puede estar relacionado con menores probabilidades de sufrir un aborto, así como con mejorar los síntomas de la menopausia.
Los alimentos ricos en omega-3 que puedes encontrar en el supermercado incluyen nueces y semillas, aceites de planta o pescado como el salmón o el atún, ¡pero nunca crudo! Esta teoría se reforzó con otro estudio, que asociaba los productos con altas cantidades de omega-3 a un aumento en las probabilidades de embarazo. El pescado azul y el marisco son los principales productos con mayor contenido de omega-3. En este sentido, la dieta mediterránea entra perfectamente en las recomendaciones de los expertos. De igual manera, se deben evitar ciertos hábitos o comidas que podrían provocar un aborto.
¿Qué puede hacer que pierdas a tu bebé?
Podemos encontrar diversos factores que pueden causar un aborto espontáneo, algunas las podemos evitar. Según ha compartido Medline Plus, la mayoría de los abortos espontáneos son causados por problemas cromosómicos que hacen imposible el desarrollo del feto. En pocas ocasiones, estos problemas tienen relación con los genes del padre o de la madre. Otras causas posibles de aborto espontáneo son:
- Consumo de drogas y alcohol.
- Trastornos de coagulación de la sangre.
- Exposición a toxinas ambientales.
- Problemas hormonales.
- Infección.
- Obesidad.
- Problemas físicos de los órganos reproductores de la madre.
- Problemas con la respuesta inmunitaria del cuerpo.
- Enfermedades graves en todo el cuerpo (sistémicas) de la madre (como la diabetes no controlada).
- Tabaquismo.
En este escenario, hay hábitos que se pueden evitar y reducir así el riesgo de sufrir un aborto. Ahora bien, la atención prenatal y el seguimiento exhaustivo del embarazo por parte de profesionales ginecólogos experimentados es la mejor vía de prevención, según explican desde Top Doctors. Cuando el aborto es causado por enfermedades sistémicas, podrían detectarse a tiempo y "tratarse o controlarse", siempre que se mantenga un control del embarazo adecuado.
Los hábitos de la madre durante la gestación también son fundamentales para prevenir el aborto espontáneo. Es decir, evitar el consumo de alcohol, tabaco, drogas y cafeína, así como intentar no