
El salario base femenino es un 13,4% inferior, pero la brecha crece hasta el 22% en los complementos salariales.
La brecha salarial de género se va estrechando poco a poco, pero aún está lejos de cerrarse. Las diferencias retributivas entre mujeres y hombres se acrecientan incluso en la letra pequeña de las nóminas. Según un informe presentado este lunes por UGT, la discriminación salarial no solo se hace patente en los salarios base, sino que además se dispara en los complementos salariales. La feminización de los cuidados provoca que las mujeres tengan una menor disponibilidad para trabajar por las noches, a turnos o en fines de semana o para hacer horas extra, lo que se traduce en sueldos más bajos.
"Las discriminaciones salariales son reflejo de las discriminaciones estructurales en el acceso al empleo, en el modo de contratación, en las dificultades de promoción o en la asignación de complementos", explicó la vicesecretaria general de UGT, Lola Navarro, este lunes en la presentación del informe, elaborado a partir de los datos de la Encuesta de Estructura Salarial de 2022 —los últimos disponibles—. El análisis señala que el salario base de las mujeres es de media un 13,38% más bajo que el de los hombres, con una diferencia de unos 200 euros mensuales (el salario base medio femenino es de 1.298 euros y el masculino de 1.498).
Sin embargo, la brecha se duplica en los complementos salariales. Las mujeres perciben de media en este concepto un importe mensual un 22,1% inferior al de los hombres, lo que se traduce en una media de unos 145 euros menos al mes (512 euros las mujeres y 657 los hombres). El informe de UGT explica esta diferencia principalmente por los complementos vinculados a la productividad y, en particular, a la nocturnidad, la turnicidad o el trabajo en fines de semana.
"Estos complementos dificultan en buena medida la conciliación de la vida laboral, familiar y personal y en mayor medida son disfrutados por hombres que delegan o pueden delegar en mujeres los cuidados familiares. Las mujeres optan en menor medida que los hombres a este tipo de complementos", explica el estudio, que atribuye también a la feminización de los cuidados las diferencias retributivas de las horas extra. Las mujeres perciben de media en este concepto un importe un 69,21% inferior al de los hombres (13 euros mensuales frente a 4), lo que supone la mayor brecha salarial en la composición de los salarios.
"La mayoría de los complementos que perciben los hombres es porque tienen mayor disponibilidad para trabajar que las mujeres, que de alguna forma estamos más relegadas por el rol de cuidadoras a tener que asistir y conciliar nuestra vida laboral y personal", afirma en ese sentido la vicesecretaria general de UGT. "Es bastante obvio que las mujeres dejamos de percibir una serie de complementos por no tener esa disponibilidad", añade.
"No solamente el ejercicio de esos cuidados, sino que la posibilidad de llegar a ejercerlos disuade a los empresarios de contratar mujeres para puestos de trabajo que necesiten gran disponibilidad", agrega el informe, que matiza que los trabajos relacionados con la salud y el cuidado de personas suponen una excepción, ya que en estas profesiones la diferencia en los complementos se acortan en favor de las mujeres. Esto se debe a que son ocupaciones cuyas dinámicas de trabajo obligan a realizar turnos y a hacer guardias de noche y en fines de semana, pero al mismo tiempo tienen una alta presencia femenina, asociada también a la feminización de los cuidados en el mundo profesional.
La diferencia en el cobro de complementos tiene un efecto sobre las pagas extra, ya que estas se calculan teniendo en cuenta la media trimestral o semestral de los complementos salariales percibidos. "A mayores complementos salariales, mayor retribución en pagas extraordinarias", señala Navarro. En concreto, la brecha de género en este concepto llega al 32,75%. A su vez, todo ello contribuye a ahondar en la diferencia retributiva del salario bruto con respecto a la del salario base (el salario bruto medio femenino se sitúa en 1.848 euros, un 16,72... {getToc} $title={Tabla de Contenidos}