Caminos Carpetania: más de 800 kilómetros para recorrer la sierra Norte de Madrid de pueblo en pueblo

En la Sierra Norte de la Comunidad de Madrid existe una red de caminos que conecta todas las poblaciones de la zona. Ideales para hacer a pie, en bicicleta e, incluso, a caballo, Carpetania está formada por 800 kilómetros de recorridos señalizados para descubrir el patrimonio natural, cultural, gastronómico y etnográfico de localidades tan emblemáticas como las villas madrileñas de Patones, Buitrago del Lozoya, Rascafría y Torrelaguna; y otras más desconocidas, como Cervera de Buitrago, Gascones, Lozoyuela o El Vellón.

“Nos inspiramos en un modelo suizo de señalización de caminos, que se basa en la conectividad total de los territorios rurales, además de en la de red de senderos, Itinerànnia, que conecta Ripollès, la Garrotxa y el Alt Empordà, en Cataluña”, explica David Pajares, técnico de Turismo de la Sierra Norte de Madrid.

Durante siete años, y teniendo en mente estos dos proyectos, el primer paso fue, según nos cuenta David, catalogar los caminos, asegurándose de que fueran siempre de titularidad pública, dando prioridad a los históricos y tradicionales que conectaban pueblos y recursos. Además, se hizo en dos fases: primero se centraron en los 200 kilómetros del perímetro que asimismo coincide con el anillo ciclista; y después, el interior. Luego, hubo una etapa de prospección de esos senderos, es decir, “ver en qué condiciones estaban y si seguían teniendo ese uso de conexión de todos los municipios de la sierra que estábamos buscando”; y finalmente, la solicitud de permisos al Área de Medioambiente de la Comunidad de Madrid. “Para nosotros era una prioridad absoluta la sostenibilidad ambiental y que hubiera el mínimo impacto posible”, puntualiza el técnico.

Carpetania es una red de caminos señalizados que conectan la Sierra Norte. (Foto: cedida)

Todos los caminos están señalizados con marcas de pintura horizontales y en cada cruce se puede encontrar un poste con banderas direccionales. Asimismo, en cada una de las 53 poblaciones de la sierra también hay una cartela informativa de la red. “Lo bueno de Carpetania es que pone en contacto núcleos grandes con pequeñas poblaciones que reciben pocas visitas. Así se reparte el flujo turístico”, indica David.

Cuatro rutas para hacer estas vacaciones

Carpetania no es un recorrido cerrado que tenga un principio y un final. “Está configurada como una malla de caminos, similar a una red de carreteras locales, por lo que el diseño de la ruta está en manos de cada uno”, apunta David Pajares. “Dependerá de dónde quieran dormir, si quieren hacer ruta de un día, una mañana o varios días, la dificultad…”. Como hay tantas variables, para facilitar esta tarea, en la web tienen 42 itinerarios ya cerrados. Algunos de los más interesantes para hacer durante el verano son:

1- La Maleza y la senda del Jarama. Esta ruta de 13 kilómetros es ideal para realizar durante la temporada estival porque transcurre por la vera del río. Parte y termina en el pueblo de La Hiruela, situado en una loma sobre el Jarama y rodeado de naturaleza salvaje. El paisaje que nos regala este trayecto se divide entre frondosos bosques de alisos, sauces, fresnos y abedules e idílicas praderas que invitan a sentarse y contemplar.

2- Cerro del Salinero y Porrejón. Otro transcurso de 12 kilómetros que permite descubrir la desconocida atalaya de El Porrejón desde donde divisar los parajes de la Sierra del Rincón y la de Ayllón. Durante la caminata también se recorre la dehesa de robles de La Hiruela y el collado del Salinero, donde es posible observar aves de montaña que suelen salir en verano, como el roquero rojo.

Algunos de los caminos son ciclables. (Foto: cedida)

3- Circular del Madarquillos. Otro sendero muy agradable que sigue parte del cauce del río Madarquillos, afluente del Lozoya, y transcurre por poblaciones como Horcajo de la Sierra, Aoslos o Madarcos. También durante el recorrido se pueden ver joyas patrimoniales, entre las que destacan las ruinas del molino de Paulino y un puente de origen incierto que, en su momento, facilitaba el camino desde Buitrago del Lozoya hasta Montejo de la Sierra.

4- El Portachuelo de Navarredonda. Tradicionalmente, los portachuelos eran pasos entre montañas que conectaban poblaciones. En esta ocasión hemos escogido el que comienza en Navarredonda y llega hasta Lozoya. Este transcurre entre el cerro de la Cruz y los Montes carpetanos, conectando el Valle Alto del Lozoya con los núcleos de población que se encuentran en el Valle Medio. Durante el recorrido también veremos el embalse de Pinilla. A diferencia de los anteriores, este también se puede hacer en bici.

Además de estas rutas ya configuradas, existe la Red Local Carpetania donde los distintos núcleos de población incluyen sus itinerarios (suelen ser muy sencillos y atraviesan áreas cercanas a las localidades). Asimismo, existen seis rutas sonorizadas en las que a través de varias estaciones sonoras se puede conocer todos los secretos de la zona que se recorre, tanto a nivel de biodiversidad como de historia del territorio. La ruta de Juana la Beltraneja, el Camino de los Canteros o las maravillas de la Sierra del Rincón son algunas de ellas.

Todos los itinerarios están disponibles de forma gratuita para su descarga en la plataforma Wikiloc

Sea cual sea el recorrido elegido, una de las ventajas de la red Carpetania es que todos los itinerarios están disponibles de forma gratuita para su descarga en la plataforma Wikiloc. Aunque en la Sierra Norte apenas hay zonas sin cobertura, se recomienda estudiar previamente la ruta y comenzar la navegación antes de iniciar el recorrido, ya que la aplicación seguirá mostrando el camino incluso sin conexión.

Carpetania es una manera no solo diferente, sino también sostenible de hacer turismo, porque anima a visitar los pueblos de la Sierra Norte y sus parajes caminando, en bicicleta e, incluso, a caballo. “Invitamos a la gente a que conozca la sierra como se conoce un territorio rural, dejando el coche aparcado. Los verdaderos tesoros naturales y etnográficos muchas veces no están dentro de los pueblos”, apunta David Pajares.

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