Jean-Jacques Annaud, artífice de la cinta protagonizada por el ganador de un Oscar Sean Connery, tiene un recuerdo poco agradable de la escritora Marguerite Duras cuando trabajaron juntos en la adaptación de 'El amante'.
El nombre de la rosa (1986) es una de las películas más recordadas de la historia del cine. La adaptación de la novela homónima de Umberto Eco estuvo protagonizada por Sean Connery y catapultó a la fama a Christian Slater, y se puede ver en España a través de Netflix, Filmin, Amazon Prime Video y Movistar Plus+. Además, sigue siendo el proyecto más recordado del director Jean-Jacques Annaud.
El realizador francés, ganador de un Oscar por Negros y blancos en color (1977), continuó dirigiendo numerosas películas después de El nombre de la rosa. En 1991, Jean-Jacques Annaud volvió a adaptar una novela, esta vez El amante de la escritora francesa Marguerite Duras, aunque la experiencia con la novelista fue un auténtico infierno para el director, tal y como ha relatado en el Festival de Lyon.
Jean-Jacques Annaud y su guerra con Marguerite Duras
En declaraciones recogidas por AllóCiné, Jean-Jacques reconoce que ya conocía la personalidad de Marguerite Duras: "Sabía que no iba a poder trabajar con una persona tan molesta", afirma el director de El nombre de la rosa, pero como en ese momento la escritora estaba ingresada en el hospital, pensó que "al menos estaría en paz". Eso sí, cuando se recuperó, el infierno se desató para el realizador.
"En innumerables reuniones en su apartamento tuve que aguantar su carácter sucio, su avaricia y su absoluta ignorancia de lo que era una adaptación", confiesa Jean-Jacques Annaud. Además, afirma que Marguerite Duras quería adaptar El amante al pie de la letra: "Se obsesionó por ver su libro reproducido palabra por palabra y exigía respetar las 20 páginas terribles que había escrito del guion", dice el director francés.
Además, Jean-Jacques Annaud también afirma que Marguerite Dunas quería a la actriz Isabelle Adjani (Possession) para protagonizar El amante, aunque se tuvo que conformar con la debutante Jane March. Tampoco quería rodar en el río Mekong, sino en el río Marne en Francia. Finalmente la película salió adelante, aunque apenas pudo recuperar el dinero que costó producirla. En España no está disponible en ninguna plataforma de streaming.
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