En algunos tipos de cuencos de alimento para mascotas aparece esta especie de capa viscosa.
La alimentación es uno de los puntos más importantes que debemos cuidar cuando se trata del bienestar de nuestros perros y gatos. Es por este motivo por el que muchos tutores se informan sobre los tipos de alimentación que hay, sus beneficios y otros aspectos importantes de la dieta.
Sin embargo, otro de los puntos más importantes y que pasa más desapercibido entre los dueños es la elección del cuenco y su limpieza. ¿Sabías que si no lavamos adecuadamente los comederos de nuestras mascotas podría suponer una grave amenaza para su salud?
De la misma forma que las personas lavamos y fregamos nuestros platos y cubiertos después de utilizarlos, deberíamos hacer lo propio con los cuencos de nuestros compañeros de cuatro patas ya que, de no hacerlo, podría aparecer el biofilm.
"Se trata de una comunidad compleja y organizada de microorganismos, principalmente bacterias, que se adhieren a superficies y se protegen mediante la producción de una matriz pegajosa de polímeros extracelulares", explica Iria Bellas, consultora veterinaria de la marca de alimentación para mascotas Lenda.
En términos más sencillos, la veterinaria explica que es como "una ciudad pegajosa que las bacterias construyen en superficies en la que las bacterias son pequeños ladrillos y que, para protegerse y permanecer juntas, usan un pegamento que ellas mismas producen", aclara.
"Este pegamento forma una película o capa que las protege de amenazas, como antibióticos o desinfectantes", agrega. "Así, el biofilm es básicamente un grupo de bacterias que se unen y se protegen mutuamente en una capa pegajosa sobre una superficie".
Esto es lo que ocurre con los comederos y bebederos de nuestros perros y gatos si no los lavamos a diario. "Los restos de comida y agua crean un ambiente perfecto para que las bacterias crezcan y formen biofilms", expresa Bellas. "Si no lavamos y desinfectamos regularmente los cuencos de nuestros peludos, las bacterias proliferan y, con el tiempo, forman una capa delgada y resbaladiza que es difícil de ver, pero está allí".
Si un peludo enferma debido a bacterias que provienen de un biofilm, el tratamiento puede ser más complicado
"Esta capa puede convertirse en una fuente de enfermedades para nuestros perros y gatos", advierte. "Pueden producir infecciones gastrointestinales como diarreas o vómitos; o afectar al sistema inmunológico de nuestros peludos por la constante exposición a bacterias".
Además, Bellas recuerda que las bacterias de un biofilm son muy resistentes a los tratamientos convencionales. "Si un peludo enferma debido a bacterias que provienen de un biofilm, el tratamiento puede ser más complicado", asegura.
Si queremos evitar poner en riesgo la salud de nuestras mascotas, tan solo tenemos que asegurarnos de limpiar adecuadamente y a diario los comederos y bebederos de nuestros peludos. "Lavar los cuencos todos los días con agua caliente y jabón y sumergir los cuencos en algún desinfectante una vez por semana durante unos minutos será suficiente para mantener a las bacterias a raya", agrega la veterinaria.
En cualquier caso, si tenemos dudas, aunque el biofilm no se puede ver (ya que es transparente), nos bastará con comprobar el interior del comedero o bebedero de nuestra mascota pasando el dedo. "Si sentimos una superficie resbaladiza es muy posible que haya biofilm", concluye la experta.
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