La showrunner Jess Brownell ha explicado la tórrida escena con la que termina la primera parte de la tercera temporada.
[ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DE LOS BRIDGERTON, TEMPORADA 3, PARTE 1]
Los Bridgerton lo ha vuelto hacer. La semana pasada, Netflix estrenaba la primera parte de la tercera temporada del fenómeno nacido de las novelas de Julia Quinn y la serie no tardaba en convertirse en lo más visto en la plataforma a nivel global, rompiendo todos los récords de las entregas anteriores.
Los nuevos episodios, centrados en el romance entre Colin Bridgerton (Luke Newton) y Penelope Featherington (Nicola Coughlan), adaptan una de las novelas favoritas de la saga, Seduciendo a Mr. Bridgerton, en la que los protagonistas pasan de ser amigos a algo más. Por lo pronto, en sus primeros cuatro episodios, la ficción nos ha traído a un Colin y una Penelope transformados.
El primero, recién llegado de sus viajes por Europa, ha dejado atrás su carácter dulce y aniñado y parece enfocado en ejercer de galán en la nueva temporada de bodas. Penelope, que sigue creciendo en fama como Lady Whistledown, se ha propuesto buscan un marido que le dé libertad y le permita alejarse de la casa familiar.
Sin embargo, cuando los caminos de los dos personajes vuelven a cruzarse, la chispa se enciende y su amistad deriva en sentimientos más profundos, sobre todo en el caso de Colin, que, tras besar a Penelope a petición de esta, no puede quitarse a la pelirroja de la cabeza.
La escena más ardiente de 'Los Bridgerton', temporada 3
La cercanía entre Penelope y Lord Debling (Sam Phillips), su pretendiente, precipita la acción y lleva a Colin a confesar sus sentimientos en una última y tórrida escena en un carruaje. El joven Bridgerton, con lagrimas en los ojos, abre su corazón a su amiga. "He pasado mucho tiempo tratando de sentir menos", le dice, ante la cara de sorpresa de ella: "Pero estas últimas semanas mis sentimientos han sido confusos. He sido incapaz de dejar de pensar en ti. En ese beso".
Ella, aún asombrada por la declaración, le confiesa que quiere algo más que una amistad con él y se besan apasionadamente. Al son de Give Me Everything, se acarician y él desliza su mano por su pierna de Penelope hasta tocarse sus partes íntimas. El placer llega a su fin cuando paran delante de la casa de los Bridgerton. Los protagonistas se ríen por lo que acaba de pasar y vuelven a besarse con dulzura antes de que Colin le pida matrimonio a la joven.
En una entrevista para Variety, la showrunner Jess Brownell se ha referido a este momento ardiente con el que nos han despedido los personajes. "Al principio, nos imaginamos a Pen y Colin sentados el uno al lado del otro, teniendo esta conversación íntima", ha contado: "Pero luego tuvimos la idea de ponerlos el uno frente al otro, en parte porque era más fácil de rodar, pero también porque así, cuando Colin quiere acercarse para expresar sus sentimientos a Penelope, debe ponerse de rodillas".
"Eso crea un escenario visual bonito para un hombre que ha ingorado a esta chica en el aspecto romántico durante dos temporadas, pero ahora debe suplicarle", ha añadido.
En otro encuentro con TV Guide, Brownell también se ha referido a la pausa que hace Colin durante la secuencia para asegurarse de que Penelope quiere lo mismo que él antes de dejarse llevar por la pasión. "Es muy importante mandar un mensaje a la audiencia moderna sobre la importancia del consentimiento y también enseñar que el consentimiento puede ser increíblemente sexy", ha desvelado: "La forma en la que Colin pregunta si está bien que siga incrementa la comunicación entre la pareja y crea más deseo entre ellos".
Si bien esta escena en el carruaje se inspira en un momento determinante en la novela de Julia Quinn, ha sido transformado en su paso a la pantalla. En las páginas, se trata del instante en el que Colin averigua que Penelope es Lady Whistledown, pero en la serie han preferido e... {getToc} $title={Tabla de Contenidos}