La joven de 21 años descubrió que habían utilizado su DNI para concertar un matrimonio fraudulento.
Mar, natural de Castelldefels, fue al cumpleaños de una amiga en Barcelona en 2023. En una fiesta, le robaron el bolso con su DNI en el interior. A pesar de que lo denunció, no llegó a saber nada más de él. Meses más tarde, haciendo unos trámites, se da cuenta de que ha sido empadronada en Barcelona.
Ante la sospecha de que le habían suplantado la identidad, vuelve a comisaría a dar conocimiento de lo sucedido. Pasadas unas semanas, le llega una carta de Hacienda a casa: "Me decían que debía 7.200 euros por intentar estafar al Estado al hacerme pareja de hecho de un hombre. Es una persona que no conozco de nada. Nunca había escuchado ese nombre", contó este jueves a Cuatro.
Así descubre Mar que su DNI ha sido usado para sellar un matrimonio fraudulento con un tal Abdelouahid Sammatou, un hombre sin papeles, seguramente a cambio de dinero. "Hacienda me dice que la pague y que luego ya me devolverá el dinero. Estoy con muchísimo estrés, no estoy durmiendo nada bien", explicaba la joven de 21 años.
Mar, que no tenía el dinero para pagar la multa, pedía que se investigue quién es ese hombre y quién vivió en el domicilio de Barcelona en el que ella constaba como empadronada. Por suerte, la Delegación del Gobierno en Cataluña comenzó a prestar atención a su caso después de una entrevista que ha concedido a Catalunya Radio.
Según publica La Vanguardia, tras la conversación, el delegado del Gobierno en la comunidad, Carlos Prieto, se puso en contacto con ella. "La tranquilizó y le dijo que van a estudiar su caso y que si todo es tal y como lo cuenta no habrá multa", recoge el diario citando fuentes de la institución.
Este mismo viernes, tras una reunión entre Prieto, la propia Mar y su madre, el delegado del Gobierno la ha asegurado que no tendrá que hacer frente a la multa. Carlos Pietro, ha asegurado la joven a La Vanguardia, le ha pedido perdón y se ha comprometido a iniciar una investigación para saber por qué las autoridades no hicieron caso a sus denuncias.