La joven ha sido premiada por su labor en la lucha contra las violencias de género a las más vulnerables.
Las violencias atraviesan la vida de las mujeres de varias formas, en todos los países del mundo, pero muchas son invisibles. La mutilación genital femenina es una de ellas. Una práctica arraigada a una cultura concreta, pero con un fin que es universal al de todas las violencias machistas: el control y sometimiento de las niñas y de las mujeres. Contra esto lucha desde hace años, todos los días, María Boente, coordinadora de proyectos en la Fundación Kirira contra la ablación.
Con 30 años recién cumplidos (Tomelloso, 1994), la joven lleva casi una década dedicada a la cooperación en varios países africanos y ahora lidera proyectos para erradicar violencias de género como la mutilación genital femenina y garantizar el acceso a una educación inclusiva. Su labor le ha valido el premio joven Avanzadora, dotado con un máster en la Universidad Nebrija, en la última edición de los Premios Avanzadoras, de 20minutos y Oxfam Intermón, que visibiliza y agradece los esfuerzos de proyectos liderados por mujeres en el marco de las celebraciones del Día de la Mujer.
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