Javier Domínguez, campeón mundial de 'Magic': "Ahora la sociedad acepta mejor a la gente que siente pasión por aficiones"


         Javier Domínguez, campeón mundial de 'Magic': "Ahora la sociedad acepta mejor a la gente que siente pasión por aficiones"

Este barcelonés de 37 años ganó, por segunda vez, el torno internacional, dotado con 100.000 dólares.

Fue a comienzos de la década del 2000 cuando su primo le descubrió "un juego de cartas al que jugaba con sus amigos de la universidad". Lo que no sabía Javier Domínguez es que esa colección de naipes serían tan importantes para él. Tanto que se ha convertido en un profesional de Magic: The Gathering y, a sus 37 años, se ha convertido en campeón del mundo.

Este barcelonés, residente en Madrid, ha logrado esta hazaña por segunda vez, algo que solo ha conseguido otro jugador, el israelí Shahar Shenhar (en 2013 y 2014). Con todo, compartir este honor no es relevante para él, pues no considera que compita "contra otra persona que haya conseguido lo mismo", sino que lo hace contra sí mismo, tal y como declara a 20minutos.

"Ganar un mundial una vez es increíble, y repetirlo no lo hace menos intenso", defiende Thalai, como se le conoce en la escena competitiva de Magic. Ahora, volverá a tener una carta conmemorativa con su nombre, como ya le sucedió cuando se hizo con el trofeo en 2018 y protagonizó el naipe Campeón ferviente.

Domínguez, el único jugador español en alzarse campeón mundial del juego de Wizards of the Coast, consiguió la victoria a finales de año en Las Vegas en un torneo en el que no contaba con hacerlo especialmente bien, pues ganó por poco en varias partidas. Terminó jugando la final contra su amigo, el portugués Marcio Carvalho, y levantando el trofeo que va ligado a un premio de 100.000 dólares (unos 97.800 euros).

"Me da para vivir, pero no es sostenible"

Para el barcelonés, Magic pasó de ser un hobby a jugar profesionalmente "hace relativamente poco, sobre el año 2017 o 2018, cuando la empresa decidió crear una liga profesional de jugadores". Sin embargo, no se gana un campeonato internacional todos los días, por lo que considera que "es más una pasión" que un trabajo, ya que le "da para vivir, pero los resultados no son sostenibles".

"La gente que vive de Magic suelen ser personas de tiendas, artistas o distribuidores; a nivel de jugador, no está pensado para que se pueda vivir de ello", señala Javier Domínguez.

No obstante, no son pocos los que compiten profesionalmente y "hace mucho tiempo que el juego tiene muy buena salud en España", apunta. "Cualquier torneo a nivel europeo tiene muchos españoles". Aun así, el Thalai cree el competitivo es bastante rotativo: "Compites unos años, lo dejas, vuelves... Te encuentras a alguien con quien jugaste muchos años antes y volvéis a jugar, y así".

"Le dedico todas las horas que puedo"

El actual campeón del mundo de Magic explica a 20minutos que, de normal, le dedica "unas pocas horas al día" a jugar, pero, "cuando se acerca una competición grande", la cosa cambia y le dedica "todas las horas" que puede.

"Entreno jugando contra otros oponentes y, si es posible, con compañeros de nivel similar. Pero también hay una parte muy importante, que es la reflexión después de jugar", detalla Javier Domínguez. "Si repites lo mismo las suficientes veces puede que te vuelvas bueno haciéndolo, pero para llegar más allá es importante analizar lo que está sucediendo y compartirlo con tus compañeros".

En cuanto a su entorno, asegura que su familia está "más que acostumbrada" a verle jugando a las cartas y, afortunadamente, la concepción que se tiene sobre este tipo de aficiones ha cambiado y la cobertura que se le da "ha mejorado con los años".

"Cómo se percibe una cultura 'friki' de cualquier tipo ha cambiado mucho a la manera en la que se percibía hace 20 años, y en ese sentido tenemos una sociedad que acepta mucho mejor a la gente que siente pasión por alguna afición", reflexiona.

Tras ganar el mundial, el siguiente paso de Javier Domínguez es "seguir disfrutando de Magic todo lo que pueda y jugar el máximo número posible de competiciones contra los mejores", pues eso es lo que realmente le encanta. "Si gano, mejor, pero si no gano más, mi premio sigue siendo disfrutar del camino".

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente

Formulario de contacto