Salvo una película con Colin Farrell, Isaac Hempstead-Wright no ha vuelto a rodar desde que acabó 'Juego de tronos', aunque tiene una buena excusa para ello.
Desde el primer episodio de Juego de tronos, Bran Stark se había pasado la serie sentado sin gran cosa que hacer. Sin embargo, millones de espectadores se enfurecieron cuando descubrieron que, a partir del último episodio, Bran Stark compaginaría su trabajo de Cuervo de tres ojos con el de rey de los siete reinos. O de los seis, mejor dicho, ya que su hermana Samsa declaró la independencia de Invernalia. Desde este momento, rodado en España (concretamente en Santiponce), han pasado seis años.
Y el tiempo pasa, también, para el propio Bran el lisiado, el primero de su nombre, rey de los ándalos y de los primeros hombres, etc. O, de ahora en adelante, simplemente Isaac Hempstead-Wright, que tampoco está mal. El actor cumplió el pasado abril 25 años. Así es hoy la vida del rey que casi nadie esperaba, y menos gente aún quería.
¿Dónde hemos visto a Isaac Hempstead-Wright?
La mortalidad en Juego de Tronos era muy alta. La mortalidad después de Juego de Tronos, también. Pocos actores han sabido mantenerse en la cresta de la ola que levantó esta serie. Algo, por otro lado, común en cualquier fenómeno televisivo de este calibre, desde Los Soprano hasta Breaking Bad. Isaac Hempsted-Wright es una de las víctimas de ese ejército de caminantes blancos llamado precariedad laboral.
Desde que acabó Juego de tronos, sólo ha intervenido en un proyecto: Instintos ocultos, junto a Colin Farrell, Lily-Rose Depp y Tye Sheridan. Y, como ocurría en Juego de tronos con su personaje, repentinamente desapareció. El propósito era el mismo que llevó a Bran Stark a perderse tantos episodios: el de instruirse. En el caso de Hempstead-Wright, en una carrera tan difícil como ser Cuervo de tres ojos: la neurociencia.
En realidad, el actor llevaba estudiando desde que rodaba la serie, pero tuvo que abandonar la universidad para centrarse en ser Bran a tiempo completo. No obstante, Isaac Hempstead-Wright ha prometido que, si acaba trabajando como neurocientífico, no renunciará a su faceta como actor. Desde luego, si algo ha demostrado Bran Stark es que es muy capaz de desempeñar las dos profesiones más difícil al mismo tiempo.
Con anterioridad a Juego de tronos, Hempstead-Wright tampoco tenía (lo que se dice) una carrera: había intervenido en La maldición de Rookford y en Circuito cerrado y doblado a un personaje en Padre de familia.
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