La familia lucha por saber qué pasó el 29 de octubre de 2020, cuando el hombre presuntamente se suicidó.
El peor día en la vida de la familia Montávez comienza y termina con una llamada de teléfono. La primera se produjo la noche del 29 de octubre de 2020. En plena pandemia de covid-19, Cristóbal, el hijo mayor de 42 años, hablaba con su madre poco antes de las 23.00 horas para decirle que ya subía a casa como marcaba el toque de queda que se había decretado tan solo cuatro días antes. La segunda se produjo sobre las 8.00 horas. La Guardia Civil informaba a la madre de Cristóbal de que su hijo se había ahorcado en el calabozo del Ayuntamiento de Jódar (Jaén) con un cordón de su chándal sobre las dos y media de la madrugada. Su cuerpo regresaba en ese momento del Instituto de Medicina Legal de la capital, donde ya se la había realizado la autopsia que determinaba que era un suicidio.
La desconfianza de la familia fue máxima desde el primer momento provocando una batalla judicial que ya dura cuatro años tras varias denegaciones y sobreseimientos del Juzgado número 1 de Instrucción de Úbeda y de la Audiencia Provincial de Jaén, y recursos por parte de la familia, que finalmente apeló al Tribunal Constitucional, que decidía abrir la causa de nuevo hace unos días. En su sentencia, a la que ha tenido acceso 20minutos y donde se detallan todas las querellas y recursos, así como el relato de los hechos, la magistrada considera que "la investigación sobre la muerte de Cristóbal no cumple las exigencias constitucionales" y que "se ha vulnerado el derecho a la tutela judicial efectiva, a un proceso con todas las garantías". En la misma, se ponen de manifiesto las claras lagunas alrededor de la investigación.
Cristóbal tenía golpes en las espinillas y los costados, los dedos de los pies morados... ves eso y crees que ha pasado algo
"No sabemos nada de lo que pasó ni cómo pasó. Queremos que se esclarezca lo que ocurrió aquella noche", espeta Loli Montávez, hermana del fallecido. Ella fue la encargada de reconocer el cadáver esa fatídica mañana de octubre de 2020. Al llegar y ver su cara, llena de golpes, pidió que le desnudaran. No entendía cómo su hermano se había podido suicidar sin haber hecho nada grave y quería ver su estado. "Tenía un golpe en la frente y moratones en la cara y por todo el cuerpo. También tenía golpes en las espinillas y los costados, los dedos de los pies morados... ves eso y crees que ha pasado algo, que no solo ha sido que lo han detenido, lo han encerrado y se ha suicidado", afirma Loli.
Tras aquella terrible escena, su padre presentó una denuncia contra la Policía Local y el Ayuntamiento de Jódar como responsable civil que el día 31 amplió: algunos vecinos afirmaban haber visto cómo los agentes golpeaban a Cristóbal en dos calles distintas de la localidad. En base al relato de estos testigos y teniendo en cuenta las lesiones del cadáver, la familia se querelló por actuación negligente basada en homicidio, detención ilegal, destrucción de pruebas, lesiones y abuso de autoridad. Además, apuntan a que no se incluyó en la investigación el informe final de la autopsia o el resultado de análisis de muestras biológicas solicitado posteriormente por la forense.
Queremos saber por qué durante tres horas que estuvo en el calabozo no se le leyeron sus derechos, ni se le permitió una llamada o un abogado de oficio
Loli confirma ahora que con esta nueva sentencia se tendrán que realizar ciertas pesquisas que fueron denegadas en inicio, como la triangulación de los teléfonos de los agentes que detuvieron a Cristóbal, las imágenes de las cámaras del centro de salud donde el hombre fue atendido antes de ser trasladado al calabozo y la testifical de las personas que presenciaron la detención y luego se negaron a declarar.
"Queremos ver cómo entró en el centro de salud, ya que el informe policial detalla que estaba agitado y que se le tuvo que dar un diazepam, pero hay gente que dice que le llevaban a rastras. Estas imágenes son determinantes para conocer su estado en ese momento", detalla Loli. "Queremos saber por qué durante tres horas que estuvo en el calabozo no se le leyeron sus derechos, ni se le permitió una llamada o un abogado de oficio (lo que se denomina abrir diligencias). Además, encontraron sangre en otro punto distinto a donde supuestamente se detuvo a mi hermano... {getToc} $title={Tabla de Contenidos}