El pequeño ha regresado a su hábitat natural tras recuperarse de las quemaduras, provocadas por un incendio.
La Consejería de Medioambiente de Castilla y León ha anunciado este martes el regreso a la naturaleza del osezno rescatado con las patas quemadas en Barniedo de la Reina (León) el 2 de agosto. El pequeño había sufrido quemaduras de diversa consideración, de las que ya se ha recuperado completamente, por lo que ha sido "dado de alta" y puesto en libertad en su hábitat natural.
"Fue un placer tenerte con nosotros, pero lo es más haberte ayudado a volver donde debes estar, libre en la naturaleza", afirma la Consejería a través de su perfil de la red social X. El osezno empezó su rehabilitación en el Centro de Recuperación de Animales Salvajes (CRAS) de Valladolid con pronóstico reservado, tras haber resultado herido en un incendio forestal declarado el 27 de julio en Villafrea de la Reina.
Tras pasar 38 días en el CRAS, el animal fue trasladado al centro de aclimatación de osos pardos de Valsemana para prepararlo para su reintroducción en la naturaleza. En un primer momento, su tamaño y peso eran muy inferiores a los estipulados para su edad, aunque poco a poco se fue recuperando de manera positiva.
Ahora, el pequeño ya está libre en la naturaleza. "Adiós amigo. No te lo tomes a mal, pero esperamos no volver a verte por el CRAS", se despide la Consejería, añadiendo además que "se contentan" con observar al osezno de lejos en la montaña y ver que "está bien". Durante la recta final de su estancia en Valmesana, la cría recuperó 13 kilos de peso y empezó a moverse con más facilidad, al haber sanado completamente las plantas de sus patas de las quemaduras.
El osezno pertenece a un grupo familiar compuesto por una osa con tres crías. No obstante, según ha informado el Diario de Valladolid, la familia del osezno todavía seguiría en paradero desconocido desde que se produjo el incendio forestal.
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