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Zamora ha revivido este sábado la pesadilla de los incendios de 2022, con el fuego declarado en Trabazos, que alcanzó el nivel 2 de peligrosidad antes de las siete de la tarde del sábado. La previsión de que hayan de pasar horas para poder atajar su avance y el corte de la carretera N-122 desde Alcañices y casi hasta la frontera con Portugal provocaron esa declaración y el despliegue de numerosos medios terrestres y aéreos en la zona. Incluso ya de noche, esa cifra alcanzaba los 52.
Uno de los momentos más delicados llegó en torno a las ocho de la tarde, cuando la cercanía de las llamas obligó a la Junta de Castilla y León a ordenar la evacuación del pueblo de Sejas de Aliste, cerca del foco inicial. Algo más de cien vecinos se movieron en un autobús fletado para la circunstancia y en coches particulares hacia el pabellón de Alcañices, donde se encontraban en torno a las doce de la noche, a la espera de saber si el riesgo disminuye y pueden regresar a sus hogares.
Todo, después de una tarde en la que el fuego se declaró sobre las cinco y diez y avanzó rápidamente por una zona de pinares. Minutos después, la Junta ya había declarado el nivel 1 al constatar que las llamas habían arrasado más de 30 hectáreas de arbolado. La proximidad a la N-122 y al pueblo de Sejas hizo que el nivel 2 llegara casi de forma consecutiva, y con él la alerta en toda la comarca, llena de gente en estos días de puente festivo.
El despliegue de medios posterior permitió que, a pesar del fuerte viento, la situación se controlara antes de que el fuego llegara a las casas de Sejas y también pese a que las llamas viraron rumbo al pueblo de San Mamed y lograron cruzar una de las carreteras secundarias que conducen a la localidad, según la información facilitada por el Puesto de Mando Avanzado, que pasadas las diez de la noche tenía la vista puesta en la situación de la carretera de Santa Ana.
En todo caso, los responsables del Puesto de Mando Avanzado confiaban en ese momento en que el viento diese un respiro y en que la bajada de temperaturas nocturna unida a los grupos que estaban trabajando en distintos flancos pudieran controlar el avance del incendio y evitaran sobre todo el riesgo para las poblaciones y para las personas.
Conviene recordar que la provincia de Zamora sufrió en el año 2022 dos graves incendios que calcinaron en torno a 60.000 hectáreas en el entorno de la Sierra de la Culebra, apenas a unos kilómetros de donde se ha declarado el de este sábado. Aquellos fuegos, separados por apenas un mes, causaron la muerte de cuatro personas entre vecinos y trabajadores del operativo de extinción. En cuanto a la perimetración del fuego, en estos momentos no existen datos de cuál es la superficie que han podido calcinar las llamas en su avance vespertino y nocturno, a la espera de información oficial.
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