Así es el 'pueblo' escondido dentro de un distrito de Barcelona


         Así es el 'pueblo' escondido dentro de un distrito de Barcelona

El distrito de Gràcia esconde muchas peculiaridades, como que fue un municipio independiente o que tiene la calle más pequeña de la Ciudad Condal.

Ciudad y pueblo. Ajetreo frente a tranquilidad. Dos conceptos muy diferentes y dos tipos de vida opuestos. Muchas personas optan por mudarse a una urbe por todas las oportunidades que le ofrece: desde un amplio mercado laboral hasta una gran variedad de servicios. Otros prefieren refugiarse en la vida relajada de los pueblos: rodeados de naturaleza y calma. Y hay quienes querrían disfrutar de las ventajas de ambos lugares, la vida de un pueblo dentro de una gran ciudad.

Esto es posible en Barcelona. La ciudad cuenta con un rincón muy especial en el distrito de Gràcia: una calle que parece un pequeño pueblo pintoresco dentro de la capital catalanas, pero alejada del bullicio del centro. Se trata del Carrer de la Fraternitat. Las casas son bajas, frente a los altos edificios de las zonas aledañas. Sus fachadas están pintadas de colores pastel y los balcones se llenan de flores con la llegada del buen tiempo. Además, está rodeada de tiendas y bares.

Algunas curiosidades de Gràcia

El Carrer de la Fraternitat se encuentra a poca distancia de algunos de los lugares más emblemáticos de Gràcia, como la Plaza de la Vila de Gràcia, el Carrer de Verdi y el Parc Güell. Esto lo convierte en un punto de partida ideal para explorar el barrio y su historia, ya que Gràcia esconde muchas peculiaridades. Fue un municipio independiente entre 1850 y 1897, cuando se unió de nuevo a Barcelona. Contaba con algo más de 13.000 habitantes y en poco más de dos décadas llegó a superar los 33.000.

En los últimos años, Gràcia se ha convertido en un barrio de contrastes: conserva su esencia tradicional, pero también es un referente de la modernidad y la innovación. Tiendas de diseño, restaurantes gourmet y locales de moda conviven con las antiguas bodegas, los talleres de artesanía y los mercados locales. Además, la calle más corta de la ciudad se encuentra en esta misma zona. Se trata de la calle de la Regomir, que mide apenas 4,3 metros de largo.

{getToc} $title={Tabla de Contenidos}

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente

Formulario de contacto