Consiste en la extirpación quirúrgica del útero, y se considera una cirugía mayor con riesgos importantes asociados. A menudo, se practica como tratamiento de varios tipos de cáncer.
La actriz estadounidense Olivia Munn ha revelado que hace un mes se sometió a dos operaciones debido al cáncer de mama que padece: una una ooforectomía y una histerectomía. Estos se suman a una ya larga lista de procedimientos previos, que incluyen una doble mastectomía completa, una disección de ganglios linfáticos, una cirugía reconstructiva y una autonomización del pezón para salvar la aureola.
Qué es y por qué se realiza
La ooforectomía consiste en la extirpación de los ovarios y las trompas de falopio, mientras que la histerectomía es la extracción quirúrgica del útero y el cuello uterino.
Se realiza de diversas formas, incluyendo a través de una incisión en el abdomen, mediante tres o cuatro incisiones menores y empleando un laparoscopio, mediante una incisión quirúrgica en la vagina o mediante cirugía robótica.
Como señala la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, existen muchas razones diferentes por las que un médico puede optar por prescribir la histerectomía, con o sin ooforectomía, a una paciente. Algunas de ellas incluyen la adenomiosis (períodos abundantes y dolorosos); los cánceres endometrial, de útero o de cuello uterino; el cáncer ovárico; el dolor pélvico crónico; la endometriosis grave que no mejora con otros tratamientos; el sangrado vaginal intenso y prolongado que no se controla con otros tratamientos; el deslizamiento del útero hacia la vagina (prolapso uterino); la aparición de tumores en el útero, como miomas uterinos; o el sangrado incontrolable durante el parto.
Los riesgos asociados
Debe tenerse en cuenta que la histerectomía se trata de una cirugía mayor, que además de los riesgos comúnmente asociados a cualquier intervención de este calibre (reacciones alérgicas, problemas respiratorios, coágulos sanguíneos, sangrado, infección o lesión de órganos cercanos) conlleva otros como la lesión de la vejiga o los uréteres, el dolor durante las relaciones sexuales, la menopausia temprana, la disminución de la libido o un incremento en las probabilidades de sufrir problemas cardiovasculares.
Los tiempos de recuperación medios varían en función de la forma en la que se realice, pero varían entre las dos y las cuatro semanas en la mayoría de las pacientes. Cuando junto a la histerectomía se realiza ooforectomía hay que tener en cuenta que se produce la menopausia, por lo que la paciente puede requerir estrogenoterapia restitutiva. Cuando la histerectomía se practica como tratamiento para un cáncer, pueden ser necesarios otros tratamientos adicionales (como radioterapia, quimioterapia, otras cirugías, inmunoterapia etc.).
Referencias
MedlinePlus. Histerectomía. Consultado online en https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/002915.htm el 14 de mayo de 2024.
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