:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fe5d%2Fe45%2Fe6c%2Fe5de45e6c5c5771c3aa5cb1fbaed74f7.jpg)
La larga sombra del exdiputado Joan Tardà planea sobre ERC. El que fuera diputado de ERC en el Congreso durante 15 años aún tiene voz dentro de su partido, aunque para hacerla sonar más fuerte se manifieste a través del actual portavoz republicano en el Congreso, Gabriel Rufián, con quien Tardà estableció un estrecho vínculo durante su coexistencia en la Cámara legislativa.
Tardà está retirado de primera línea organizativa, pero continúa en la primera línea ideológica. La reflexión de Rufián de crear una coalición de “toda la izquierda plurinacional” como fórmula electoral es una idea cimentada y pulida, en realidad, por Joan Tardà. El portavoz republicano dijo que “nos toca a las izquierdas soberanistas, independentistas, autodeterministas, federalistas o confederalistas crear esta izquierda plurinacional que durante tantos años se ha pedido. A la izquierda del PSOE no hay nada. Me da igual quién lo lidere, pero si no nos ponemos de acuerdo, nos matarán políticamente por separado”.
Lo que plantea Rufián en el ámbito 'español' sería reproducir una fórmula utilizada en las europeas, aunque en esos comicios existe circunscripción única. “Hay un espacio huérfano, un espacio a crear, plurinacional de verdad, que no esté creado desde un despacho de una Universidad de Madrid”. Es un misil al dirigismo de Podemos y Pablo Iglesias, porque su estrategia prevé atraerse a Bildu, BNG, comunes, Compromís, las mareas y otras plataformas territoriales, en una coalición inédita. La portavoz de ERC en el Parlament, Ester Capella, fue la encargada de desautorizar a su portavoz en el Congreso. “No estamos en ese escenario. Eso no está sobre la mesa”. Los dirigentes de las distintas familias de ERC fueron dando su particular palo al portavoz en Madrid. Nadie dentro de ERC parece querer un frente amplio, salvo Tardà, Rufián y sus acólitos.
Portavoz de TardàEn algunos segmentos republicanos, consideran que “Rufián ha hecho de portavoz de Tardà. Sabe que le pueden atizar e incluso se ve bien que haya alguna nota discordante, pero la cosa no tiene por qué ir a más. Apunta a una posibilidad que está ahí y que la dirección de ERC puede activar o no cuando le convenga. De hecho, lo que ha expuesto es una operación política que pinta muy bien sobre el papel, pero cuya plasmación concreta es casi imposible”, razona un dirigente republicano. Los más optimistas aducen, incluso, que ERC se encuentra ahora mismo “en una etapa de recuperación, después del bajón importante en las últimas elecciones. Y si vamos por el buen camino, ¿por qué nos vamos a desviar ahora?”.
Tardà planteó exactamente lo mismo que Rufián, aseguran las fuentes, a principios de año, después de presentar su corriente a la que denominó Àgora Republicana: una plataforma amplia con fuerzas periféricas como los comunes y la CUP en Cataluña, lo que vendría a ser el nuevo tripartito que quiere aislar y desbancar a los socialistas de la ecuación. De hecho, un sector de los comunes capitaneado por Ada Colau, Gerardo Pisarello y Jaume Asens ha sondeado abiertamente la posibilidad de una coalición electoral que englobase a las fuerzas de izquierdas y soberanistas en Cataluña. El tripartito PSC-ERC-comunes pasaría, así, a la historia, suplantado por el de ERC-comunes-CUP.
Círculos cercanos a los comunes se han sumado inmediatamente al carro. “La unidad no es un deseo: es una obligación histórica”, resalta la plataforma Spanish Revolution, que durante años ha sido uno de los puntales de los comunes y ha oficiado como think tank de las nuevas izquierdas. “La historia no espera a nadie. Y mucho menos a una izquierda que se entretiene contando sus heridas mientras el monstruo crece. La desunión no es sólo un error estratégico, es una traición a quienes lo han dado todo esperando un cambio que nunca llega”.
"Si no nos ponemos de acuerdo, nos van a matar por separado. Y no es una metáfora. Es un aviso"
Zanja la plataforma que “Rufián lo dijo claro: ‘si no nos ponemos de acuerdo, nos van a matar por separado’. Y no es una metáfora. Es un aviso. O nos entienden como una alternativa común o nos barrerán como residuos de una esperanza muerta”.
En la CUP, esta semana ha sorprendido la dimisión de su portavoz parlamentaria, Laia Estrada, por diferencias con la cúpula de la organización. Esta dimisión podría allanar el camino si realmente en algún momento existe la intención de sondear una coalición amplia.
Las izquierdas articuladas en torno a ERC en Cataluña o en España serían una posible salida al callejón sin salida a que ha llegado el independentismo. La propuesta de Rufián y Tardà es el rescate y la puesta al día del viejo posicionamiento republicano de una España federal, que muchos parecen haber olvidado. Incluso el expresidente de ERC Heribert Barrera, nada sospechoso de no ser independentista, hacía circular un lema que quema a muchos de sus compañeros de filas: “Dentro de Cataluña, somos nacionalistas; dentro de España, federalistas; dentro del mundo, hombres de libertad. Siempre fieles a nuestro pueblo”.
Pero la cúpula republicana no lo ve claro. No quiere diluirse ni perder su identidad. “La marca es lo suficientemente potente como para arrastrar el voto. Es más: una parte del voto que tiene Esquerra se iría si se plantea una opción semejante. Y lo mismo ocurriría en las demás formaciones. Posiblemente, podría ser peor el remedio que la enfermedad”, aducen fuentes republicanas a El Confidencial.
Disparos contra RufiánAlgunas fuentes apuntan a que el portavoz de ERC en el Congreso busca acomodo en la villa y corte. Según estas fuentes, “Rufián no quiere volver a Cataluña. Se encuentra cómodo en Madrid, donde es respetado”. El portavoz republicano fue el que en 2017 vaticinó que sólo estaría 18 meses en el Congreso, porque tras la proclamación de la independencia volvería a Cataluña. Allí sigue. Lo malo es que sus enemigos políticos le recuerdan su aseveración día sí y día también. El actor Joel Joan, en otro tiempo uno de los puntales de ERC, aprovechó para clavarle un puñal político este miércoles: “No es que ya no sean independentistas, es que se autodefinen ‘periféricos’. De los 18 meses y nos vamos a esto”.
Desde otras formaciones, se frotan las manos ante la espantá de Rufián. Cristina de Haro, una conocida gurú posconvergente más conocida como Cris Gallifantes, aseguraba que “estamos comentando el tuit de Rufián como si hablase por los catalanes. Y sólo habla por los españoles. Sabe que en Cataluña su carrera se ha acabado”.
La ambición de Rufián y la pieza sobrante: lo que se agita en las izquierdas
Esteban Hernández
Desde el Cadci, una plataforma radical que agrupa mayoritariamente a funcionarios independentistas, se aventura que el empresario Jaume Roures “apuesta por una lista conjunta ERC, comunes y CUP y Rufián se postularía de cabeza de lista”. De hecho, quien trabaja para lograr ese frente es el Institut Sobiranies, al que algunos achacan el apoyo de Roures y cuya propuesta es una coalición ERC-comunes-CUP. Entre los integrantes de Sobiranies se hallan Xavier Domènech y la exconsellera de Justicia Gemma Ubasart, miembros destacados de los comunes. Sobiranies nació en 2020 como confluencia de los posicionamientos de las izquierdas protagonistas del procés y del 15-M. Una de sus prioridades es “generar sinergias entre el soberanismo de izquierdas dentro y fuera de las instituciones”.
Lo cierto es que Rufián se ha convertido en el enemigo a batir para Junts. Ya no es sólo su ácido enfrentamiento con la portavoz de JxCat en el Congreso, Míriam Nogueras, con quien no tiene feeling alguno. “El que no quería una lista unitaria independentista, propugna ahora una lista unitaria en España. Es difícil de entender y de explicar”, critican sus rivales. “Que nadie se extrañe de lo que pueda pasar, pero Rufián acabará en las filas del PSOE. Todos sus movimientos van en esa dirección”, zanjan maliciosamente en la formación posconvergente.
{getToc} $title={Tabla de Contenidos}