El animal estaba dentro de un habitáculo carente de condiciones mínimas de higiene.
La Guardia Civil ha explicado este lunes que está investigando a una vecina de L'Aldea (Tarragona) como presunta autora de un delito de maltrato animal de sus dos perros. Según ha informado el instituto armado en un comunicado, agentes del Puesto de Amposta detectaron durante una inspección rutinaria a los dos animales en un cobertizo de una casa rurales.
En ese momento, vieron que uno de los perros presentaba "claras muestras de falta de salud". Los agentes de la Guardia Civil comprobaron que el animal estaba dentro de un habitáculo carente de condiciones mínimas de higiene y de una zona techada, por lo que no podía refugiarse de las inclemencias del tiempo, y que no disponía de agua limpia ni comida.
Por ello, avisaron a la Policía Local de L'Aldea, quienes activaron el protocolo municipal para estos caso. Además, se avisó a la protectora Associació per al refugi i cura dels animals de L'Ebre (ARCA).
El animal fue trasladado a una clínica veterinaria, como marca el protocolo, donde fue atendido de manera urgente y se le diagnosticó leishmaniosis y filariosis, entre otras patologías, así como malnutrición extrema, por lo que se ordenó su ingreso en un hospital veterinario.
Por su parte, la Guardia Civil identificó a la propietaria e instruyó diligencias que ha entregado al Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Tortosa (Tarragona) por un presunto delito de maltrato animal, penado con cárcel, multa e inhabilitación para ejercer profesiones relacionadas con animales o para tenerlos.
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