Para que las patatas cocidas queden mucho más sabrosas y cremosas, lo ideal es hervirlas en caldo de verduras, carne, pescado o incluso en leche.
Las patatas son un ingrediente esencial en la gastronomía de muchos países, especialmente en España, donde se utilizan en platos tan populares y queridos como la tortilla de patata o el puré. Sin embargo, muchas personas las hierven de la forma más básica: en agua con sal.
Aunque este método funciona, hay un truco que está arrasando en redes sociales y que puede hacer que las patatas hervidas queden mucho más sabrosas. En lugar de cocerlas solo en agua, se puede usar caldo de verduras, carne o pescado, leche o agua aromatizada con especias para que absorban más sabor y quede un resultado aún más delicioso.
Cómo hervir patatas con este truco
El secreto para que las patatas hervidas sean todo un abrazo al paladar está en el líquido en el que se cocinan. Por eso, en lugar de seguir con la tradición de usar solo agua con sal, se recomienda elegir opciones mucho más sabrosas, como un caldo casero de verduras o de carne, que aportará profundidad y mucho más sabor. Por otra parte, si se hace una receta que lleve pescado y patata hervida, cocerlas un caldo de marisco va a ser la mejor opción para potenciar el plato.
Otra alternativa es cocer las patatas en leche con especias para cuando se quiere hacer un puré que acompañe a alguna otra comida. Haciéndolo así se consigue una textura súper cremosa, con mucho aroma y, además, la leche ayudará a suavizar el sabor natural de la patata, pero sin enmascararlo.
Si se prefiere hervirlas en agua, como toda la vida, también se le puede dar un extra de sabor añadiéndole especias y hierbas aromáticas como romero, tomillo, orégano o incluso un poco de cúrcuma, que además les dará un toque de color.
Otros trucos para cocer unas patatas perfectas
Uno de los problemas más comunes al hervir patatas es que, si se cuecen durante mucho tiempo, pueden deshacerse o coger un tono oscuro y poco apetecible. Por eso, para evitarlo, existe un truco muy sencillo y eficaz: añadir unas gotas de limón o un chorrito de vinagre al agua de cocción.
Estos ingredientes no solo ayudan a que las patatas mantengan su forma y textura firme, sino que también potencian su sabor. Además, las propiedades ácidas del vinagre o el limón actúan como un antioxidante natural, evitando que las patatas adquieran ese tono grisáceo que a veces aparece después de cocerlas.
Otro consejo para conseguir unas patatas hervidas perfectas consiste en no lavarlas con agua después de pelarlas, ya que esto elimina el almidón natural que tienen y que contribuye a conseguir una textura más cremosa. Por eso, lo ideal es pelarlas, chascarlas y cocerlas directamente en el caldo o líquido que se quiera.
Otro consejo es evitar secarlas con papel absorbente después de cocerlas, ya que es mucho mejor escurrirlas bien y dejarlas reposar unos minutos para que pierdan ese exceso de humedad. Esto hará que conserven mejor su sabor y no queden muy secas.
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