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2025 arranca para el PP con el mismo propósito que el año anterior: que Sánchez dé el paso de disolver las Cortes y convocar elecciones cuanto antes. Es el deseo más repetido por los portavoces del primer partido de la oposición, aunque en Génova se asume desde hace tiempo que es un escenario prácticamente imposible, y que el jefe del Ejecutivo tratará de estirar su mandato el máximo tiempo posible. "Lo que haría un presidente responsable y razonable, ante una inestabilidad parlamentaria más que evidente y ante los casos de corrupción que le acechan, es convocar elecciones para que los españoles puedan opinar sobre lo que hemos vivido este último año, un sobresalto continuo", apuntó el portavoz nacional del PP, Borja Sémper, en la primera valoración del año.
El dirigente popular llevaba semanas sin atender a los medios de comunicación, un rol que ha desempeñado en su lugar su compañera de partido y de dirección, la vicesecretaria Ester Muñoz, a la que Feijóo pretende dar galones y mayor visibilidad en los próximos meses. En su primer balance del año, Sémper ha pronosticado un 2025 "plagado de problemas y polémicas" de un Gobierno que permanece "vinculado a la corrupción y a los juzgados".
El portavoz del PP ha incidido en que, pese al "lastre" que a su juicio supone Sánchez para España, la "obsesión" del PP va a ser "que caiga el muro de la división política y social y del enfrentamiento continuo". Sémper ha abogado por una política "edificante", y por eso en los primeros compases del año el PP impulsará diversas iniciativas sociales que había paralizado por el estallido del 'caso Koldo' y el horizonte judicial del Gobierno. "No estamos condenados a vivir enfrentados y que la mala política lo contamine todo", reiteraba.
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Europa Press
No obstante, ese discurso conciliador se pierde con las críticas que ha exhibido Sémper a derecha e izquierda por la falta de consenso en el discurso migratorio. El dirigente ha alejado, una vez más, la posibilidad de que el PP firme un pacto con el Gobierno para agilizar el reparto de menores no acompañados desde Canarias al resto de comunidades autónomas sin que venga acompañado de sus medidas para frenar los flujos migratorios. "Nuestra propuesta está encima de la mesa, y la respuesta que hemos recibido del Gobierno es la nada", reiteraba.
En este punto, y preguntado por si le parecía también reprochable la actitud de Vox por bloquear los presupuestos autonómicos en seis comunidades autónomas gobernadas por el PP a cuenta de la inmigración, Sémper ha igualado la actitud "irresponsable" tanto del PSOE con la de Santiago Abascal. "Son dos discursos irresponsables. Uno el de Sánchez, que dice que la inmigración no tiene ningún impacto y hay que resolverlo como él diga; y otro el de Vox, que dice que el origen de todos los males que afectan a España tiene que ver la inmigración".
"Hay una coincidencia entre Sánchez y Vox por atizar al PP a costa de cualquier tema", censuraba. No obstante, y a diferencia de otros portavoces del PP como Miguel Tellado, que ha cerrado la puerta a volver a sentarse con el Gobierno, Sémper sí ha hecho una apuesta por el diálogo para intentar "llegar a acuerdos". "Estamos dispuestos a sentarnos", incidía.
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