En medio del shock provocado por el abrupto final de la carrera política de Íñigo Errejón, hay quien ya piensa en el momento posterior a la sacudida. Las denuncias por acoso machista se suceden cuando se acaban de cumplir las 24 horas desde que el exlíder de Más País anunció su dimisión de todos los cargos orgánicos e institucionales, pero en IU ya han puesto el foco en quién será la persona que sustituya al exdirigente de Podemos al frente de la portavocía del Congreso de los Diputados. El líder de la federación de izquierdas, Antonio Maíllo, ha dicho este viernes desde Málaga que su formación debe tener margen de maniobra en la elección de la nueva cara visible de Sumar en la Cámara baja en medio de una crisis de reputación que ha dejado más débil aún a la coalición magenta.
"Es el momento de afrontar una catarsis", ha dicho el coordinador federal de IU en un acto en Casabermeja, donde ha defendido la necesidad de que las distintas formaciones que están bajo el paraguas de Sumar en la Carrera de San Jerónimo deben tener voz y voto en la nueva organización del grupo. Sumar logró 31 escaños en las elecciones del 23 de julio de 2023, pero se dejó 5 por el camino tras la ruptura con Podemos, lo que dejó a los de Yolanda Díaz con 26 diputados. Al poco tiempo ganaron uno, ya que la dimisión de Lilith Vestrynge dio paso a una diputada de los comunes en la lista de Barcelona.
El principal grupo dentro de la alianza magenta lo forman los 11 diputados que responden a la propia Díaz, seguidos de los 6 escaños de En Comú y los 5 de IU. Más Madrid cuenta con 3 representantes, ya que la sustituta de Errejón en la lista de la capital corresponde a su mismo partido, dos proceden de Compromís, uno de la Chunta Aragonesista y otro de Mès per Mallorca. Esa correlación de fuerzas es la que funcionará en la nueva etapa dentro de Sumar, que recibe un nuevo varapalo sólo cuatro meses después del batacazo de las elecciones europeas que ya obligó a redirigir la estrategia del espacio político que encabeza la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo.
"Es una decisión que nos compete a todos", ha advertido Maíllo desde Málaga, donde ha estado acompañado del líder andaluz de IU y también diputado de Sumar, Toni Valero. El dirigente izquierdista cree que la salida de Errejón debe servir para que la izquierda repiense las fórmulas que ha seguido hasta ahora para la toma de decisiones y eso también incluye a los nombramientos. Visto con retrospectiva, el político cordobés desliza un tirón de orejas a la cúpula de Sumar, la que elevó al exportavoz a cara visible de Sumar en el Congreso a pesar de que el ruido sobre las denuncias y el problema de adicciones reconocido por él mismo ya era conocido o, al menos, existía una sospecha.
Una fuente del grupo parlamentario magenta reconocía este jueves que hubo una cierta extrañeza por la elección del madrileño como sustituto de Marta Lois, el pasado enero, cuando la gallega se volvió a su tierra para las elecciones autonómicas. Maíllo, por su parte, ha asegurado que conoció la situación de Errejón cuando se produjo su dimisión, pero que después si le han llegado testimonios de personas del espacio político que sabían de las denuncias.
"La violencia machista tiene mucho que ver con la política, un machito alfa con poder es una bomba de relojería", ha continuado el líder de IU, que ha admitido la contradicción que supone este choque para una izquierda que ha hecho del feminismo una de sus principales banderas. Maíllo ha hablado de "desánimo" y ha llamado a "reestructurar las cabezas de la gente", al tiempo que ha dedicado palabras a las víctimas, a quien les ha ofrecido el apoyo de su partido.
La relación de Íñigo Errejón con IU ha sido bastante fría en la década en la que ha estado en primera línea política. Hay quien dentro de la federación de izquierdas considera al madrileño un "anticomunista". Errejón siempre estuvo en los postulados contrarios a IU, sobre todo cuando Pablo Iglesias se acercó a Alberto Garzón para armar la coalición Unidas Podemos después de unos primeros años de frialdad entre las dos formaciones. El momento de mayor cercanía se ha dado precisamente en el último año, cuando Errejón se acercó a Yolanda Díaz para poner en marcha Sumar, que contó con el apoyo cerrado del partido de Antonio Maíllo en sus primeros pasos. Ya con la coalición funcionando en el congreso, IU se alejó de las decisiones de Díaz, que armó a su alrededor un núcleo duro en el que entró Íñigo Errejón, que disolvió Más País dentro del partido magenta en su intento por desplegarse en lo orgánico.
Una fuente de IU, tras conocerse la dimisión de Errejón y sus motivos, optó por el refranero español para señalar, de forma velada a la cúpula de Sumar por la preponderancia que había tomado el madrileño. "Quien con niños se acuesta...", expresó esta fuente, que considera que el exsecretario Político de Podemos y fundador de Más Madrid ha sido "un carpe diem de la política".
"Mi impresión es que esto pasará", expresa un dirigente de IU cuestionado sobre los efectos que tendrá la dimisión de Errejón tras la denuncia de acoso. "Y no fortalece, obvio", continua. Pero cree que el futuro político de Sumar depende de "cómo se resuelva" esta crisis y existe la oportunidad de que sea con un "buen giro" después de un suceso que, en palabras de Maíllo "ha abierto en canal a la izquierda".
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