El dolor de espalda es uno de los más habituales, causado principalmente por malas posturas y largas horas sentados trabajando. Ejercicios, como los que se hacen en yoga, pueden ayudarnos a sentirnos mejor y aliviar un poco esas molestias
Convivir con el dolor no es sencillo y, mientras que en algunas ocasiones no queda más remedio que conformarse, hay otras en las que un entrenamiento adecuado puede ayudarnos a reducirlo, haciendo que nuestra vida sea más confortable. En España, uno de los dolores más frecuentes es el de espalda, que afecta tanto a la columna como a la zona lumbar, sin olvidar la región cervical, una zona amplia que podemos reforzar haciendo ejercicios, como los que nos propone el yoga.
Esta disciplina nos ayuda a entrenar el cuerpo por completo, pero también hay muchos ejercicios que pueden ayudarnos a reforzar y trabajar zonas concretas, tanto en el caso de personas que llevar tiempo practicándolo como el de aquellas que acaban de comenzar y son todavía principiantes. Posturas con las que estirar los músculos y tonificarlos mientras protegemos las articulaciones, mejorando nuestra postura y reduciendo algunos de los focos del dolor.
Cinco ejercicios sencillos de Yoga para la espalda
Entrenar para tener una espalda fuerte puede ser una buena idea, mejora la postura, reduce los dolores y ayuda a equilibrar el resto del cuerpo, por eso hay algunas posturas o asanas de yoga muy recomendables cuando se quiere incidir sobre esta zona, como estas cinco:
- Postura gato-vaca. Para realizar esta asana es necesario ponerse en cuadrupedia sobre la esterilla de yoga, inhalando por la nariz, arqueas la espalda mientras bajas la cabeza, tratando de mirarte el ombligo. Al exhalar, arqueas la espalda en sentido contrario, mientras se eleva la cabeza abriendo el pecho.
- Perro boca abajo. En esta postura, la espalda y los brazos deben quedar alineados, elevando la cadera mientras nos apoyamos sobre los pies y las palmas de las manos. No es una postura sencilla de hacer al principio, por lo que puede requerir práctica hasta que se mejore y se puedan estirar las piernas y no elevar los talones.
- Postura del niño. Si la anterior no era sencilla, esta es todo lo contrario, ayuda a estirar la espalda, pero también a relajarnos. Sentado sobre los talones, con los dedos gordos juntos, echa la espalda hacia delante y estira los brazos por completo.
- Postura de la paloma. Ideal para la zona de la cadera, la postura de la paloma abre el pecho, mientras estira muslos y glúteos, y es ideal para quienes pasan mucho tiempo sentados. Sentado sobre la esterilla, flexiona una pierna y colócala delante del cuerpo, mientras estiras la otra hacia atrás. Puedes apoyar las manos a ambos lados del cuerpo mientras abres el pecho para que la cadera gane flexibilidad.
- Torsión en suelo. Esta postura es ideal para estirar la espalda, los hombros, el abdomen y las caderas, pero también favorece el tránsito intestinal. Tumbado boca arriba, flexiona una rodilla y abrázala contra el pecho, con la mano contraria empújala hacia el lado contrario (por ejemplo, si has flexionado la pierna derecha, empújala con el brazo izquierdo hacia el lado izquierdo), mueve las caderas ligeramente hacia el lado contrario y extiende el brazo con el que no sujetas la pierna. Gira la cabeza hacia el lado de la pierna flexionada (en este caso sería la derecha).
Yoga para principiantes, beneficios de esta disciplina
Mantenerse activo siempre es buena idea cuando queremos cuidar nuestra salud, el ejercicio físico tiene ciertos beneficios que pueden ayudarnos a sentirnos mejor, tanto física como mentalmente, por eso cualquier actividad que queramos incorporar en nuestro día a día es bienvenido, siempre que se adapte a nuestra forma física y se tengan en cuenta lesiones previas, para evitar empeorarlas.
El yoga es una estupenda disciplina que puede adaptarse al nivel de quien la practica, además de ayudarnos a relajarnos y ganar confianza en uno mismo, mejorar la coordinación, el equilibrio y ayudarnos a trabajar la respiración. Mejora la postura y fortalece los músculos, ayudando a tonificar y equilibrar la figura, pero además también reduce la presión arterial y la frecuencia cardiaca, reduce los dolores de espalda, mejora la concentración y nos ayuda a dormir mejor, así como a tener mejores digestiones, reduce el estrés, la ansiedad y la depresión.
Quienes decidan darle una oportunidad al yoga, será recomendable que empiecen poco a poco, siguien... {getToc} $title={Tabla de Contenidos}