La Capital del Albariño es un auténtico museo al aire libre repleto de mansiones señoriales y monumentos, entre los que destacan los restos de la Iglesia de Santa Mariña Dozo con categoría de Monumento Nacional.
Si algo no falta en las Rías Baixas son pueblos de lo más interesantes, tanto desde el punto de vista cultural, paisajístico como gastronómico. No es ningún secreto que si queremos comer buen marisco, uno de los mejores lugares es O Grove y que si nos apetece disfrutar de playas salvajes, debemos acercarnos a Sanxenxo. Pero hay también una preciosa villa marinera de la ría de Arousa que no podemos pasar por alto. Se trata de la localidad pontevedresa de Cambados, donde además de su bonito centro histórico y de numerosos pazos, podrás visitar unas ruinas que son uno de los lugares más mágicos de toda Galicia.
Las Ruinas de Santa Mariña Dozo
Es uno de los lugares más importantes de Cambados y de toda Galicia. La antigua iglesia, construida en el siglo XV y hoy en ruinas, era de estilo gótico marinero con toques renacentistas. Actualmente de este monumento religioso tan solo queda su nave y cuatro arcos. Pero lo más impactante de este tenebroso lugar es que junto a las ruinas se encuentra el cementerio de la localidad. Si vas en invierno o en un día de lluvia, la sensación de inquietud la tienes garantizada.
Un casco antiguo declarado Bien de Interés Cultural
Y después de visitar el monumento estrella de Cambados, toca descubrir las otras maravillas de la localidad, entre las que destaca su precioso centro histórico. Declarado Bien de Interés Cultural, está formado por calles empedradas repletas de mansiones señoriales, monumentos y esculturas.
Está claro que Cambados está lleno de lugares imprescindibles que dan para más de una visita. Construida en estilo italiano, la enorme Plaza de Fefiñans es el centro neurálgico y un lugar que no debes perderte. Y no solo por su belleza, también porque está rodeada por algunos de los edificios más destacados, como la Iglesia románica de San Benito y el Pazo de Fefiñanes, del siglo XVI y estilo renacentista, hoy alberga una de las bodegas de albariño más populares de la localidad.
La tierra del albariño y los mejillones
Estás en la tierra del marisco, pero también del buen vino, y aquí la variedad de uva reina es el albariño. Si eres amante del enoturismo, te aconsejamos realizar una ruta por las bodegas de Cambados (ruta do Viño), unas cuantas se encuentran en el casco urbano y otras están por los alrededores. A la hora del aperitivo no se nos ocurre mejor manera de saborear Cambados que dando buena cuenta de uno de los mejores vinos de España acompañado de otro de sus producto estrella: los mejillones.
Uno de los tesoros históricos de Cambados
Y con el aperitivo ya bien disfrutado, desde el paseo marítimo podrás llegar a uno de los mayores tesoros históricos de Cambados. Se trata de los restos de la Torre de San Sadurniño, que se encuentra frente a las aguas del Atlántico. Se accede atravesando un estrecho puente de piedra desde el precioso barrio marinero de San Tomé do Mar. La torre fue construida en el siglo VIII para proteger Cambados de los ataques de vikingos y otros invasores, y después se usó también como faro.
Por cierto, que justo a la entrada del barrio de San Tomé do Mar se encuentra el Museo Casa do Pescador, ubicado en la que era la antigua Casa Jovita. Una visita interesante que te permitirá descubrir cómo vivían antiguamente los pescadores de la zona.
Cómo llegar a Cambados
Cambados se encuentra a 12 kilómetros de Sanxenxo, a unos 20 de O Grove y a 30 kilómetros de Pontevedra. Desde esta ciudad salen autobuses diarios, con una frecuencia de dos veces al día, y tardan en hacer el recorrido aproximadamente una hora.
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