Los frutos secos son un alimento saludable que podemos incluir en nuestra alimentación de manera moderada para aprovechar sus beneficios. En el caso de los pistachos esto no es diferente, porque nos ayudan a combatir tres enfermedades muy habituales
Ideales para acompañar la merienda, como snack de media mañana o para incluir en las ensaladas, los frutos secos son un acompañamiento ideal a lo largo del día; además, tienen grandes beneficios para la salud. En España, los cuatro frutos secos que más se cultivan son las almendras, las avellanas, las nueces y los pistachos.
Estos últimos son unos de los más desconocidos, un capricho que no es demasiado habitual, tal vez por el esfuerzo que supone tener que pelaros, algo que de hecho contribuye a que sean ideales en dietas para adelgazar, porque el rato de quitarles la cáscara hace que seamos más conscientes de la cantidad que estamos comiendo. Tomarlos a diario puede ser una buena idea para combatir algunas enfermedades.
Pistachos: propiedades y beneficios
Su tamaño pequeño puede hacer pensar que los pistachos no pasan de ser un fruto seco delicioso y que aporta un toque de color a nuestros platos, pero en realidad esconden grandes propiedades que pueden resultar muy beneficiosas para nuestra salud, si incluimos los pistachos en el marco de una dieta variada y saludable. La cantidad diaria recomendada sería de un puñado, aproximadamente, unos 30 gramos de pistachos, que equivaldría a unos 30 pistachos (con cáscara).
Los pistachos destacan entre el resto de frutos secos por ser muy nutritivos, contienen un 20 % de proteína vegetal y también es muy rico en hidratos de carbono, pero de absorción lenta, ideales como aporte de energía. Contienen grasas insaturadas, son ricos en fósforo, potasio, pero también en hierro, así como zinc y vitamina E. Son también ricos en antioxidantes y, sobre todo, en fibra, por lo que son ideales para el sistema digestivo.
Enfermedades que los pistachos ayudan a combatir
Alrededor de los frutos secos siempre ha habido ciertos mitos, como que son alimentos demasiado grasos y que pueden dificultar la pérdida de peso. Esto se ha demostrado falso, además de ser alimentos saciantes, lo que los hace ideales en cualquier dieta, ya esté pensada para adelgazar o no. Son también un estupendo complemento para la salud, siempre consumidos con moderación y en su justa medida, ayudando a combatir algunas enfermedades habituales.
Los pistachos ayudan a reducir el riesgo de desarrollar problemas cardiovasculares, como los infartos de miocardio o accidentes cerebrovasculares. Esto es gracias a su contenido en vitaminas E, ácido fólico y fitoesteroles. Además, un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Pennsylvania, determinó que incluir los pistachos en la alimentación mejora el control de la desaturasa y produce un leve descenso en el colesterol LDL.
También son beneficiosos para combatir la hipertensión arterial porque facilitan la síntesis de óxido nítrico, que es potente vasodilatador, lo que reduce la presión arterial. Frente a una dieta, sin ellos, el incluir estos frutos secos se ha demostrado beneficioso, pues consigue que, ante situaciones de estrés, se reduzca la presión arterial sistólica y la frecuencia cardíaca.
El consumo de pistachos mejora la resistencia a la insulina y disminuye el incremento de los niveles de glucosa en sangre después de las comidas, tal y como mostró un estudio realizado por la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona, por lo que se considera a estos frutos secos un buen aliado para evitar la diabetes tipo II. Otro estudio de la Universidad de Toronto mostró que consumidos solos el efecto era mínimo, pero cuando se tomaban tras una comida alta en carbohidratos, sí que había una respuesta más clara ante el paso del azúcar al organismo. Además, siempre se destaca de los pistachos su alto contenido en fibra y en antioxidantes.
Referencias
Kendall, C. W. C., Josse, A. R., Esfahani, A., & Jenkins, D. J. A. (2011). The impact of pistachio intake alone or in combination with high-carbohydrate foods on post-prandial glycemia. European Journal Of Clinical Nutrition, 65(6), 696-702. https://doi.org/10.1038/ejcn.2011.12
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