Una de las cosas más habituales cuando salimos de viaje y vamos a lugares como aeropuertos o estaciones es poner a cargar el móvil en tomas de corriente públicas. Esto puede convertirse en un ciberataque hacia nosotros.
Al irnos de vacaciones o si decidimos viajar a cualquier sitio, utilizamos mucho los móviles y como tal la batería se nos agota, por lo que hacemos uso de cargadores o USB públicos para ponerlos a cargar, siendo estos un punto de acceso para los ciberdelincuentes. Estos se aprovechan de dicha circunstancia para acceder a los datos personales y bancarios de nuestro teléfono. Esto se conoce como ‘juice jacking’.
¿Qué es y cómo funciona el ‘juice jacking’?
El ‘juice jackin g’ es un tipo de ataque utilizado por los ciberdelincuentes para instalar malware en los dispositivos que se conectan a puntos de carga públicos (normalmente a través de USB), así como obtener datos confidenciales. Es decir, podrían robarte información así como tener acceso remoto al dispositivo.
Además de esto, también los cables USB pueden estar infectados y provocar la misma consecuencia, por lo que tampoco podemos fiarnos al utilizar los cables que haya disposición en lugares públicos. Para que esto no ocurra, la mejor solución es llevarse un cargador portátil USB o un cargador normal con su cable para conectarlo en lugares seguros.
Si es una situación de emergencia y necesitas hacer uso de la toma de corriente de un lugar público como puede ser un aeropuerto, te recomendamos que desactives la transferencia de datos al conectarse al cargador y que esté cargando el menor tiempo posible. Para protegerlos todavía más, es recomendable mantener el dispositivo actualizado con sus últimas versiones de cara a que tengan una mejor protección en las vacaciones.
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