El PP da por hecho que el PSOE "se replegará" y facilitará la comparecencia de Sánchez en el Congreso. Pero asume que la Moncloa intentará controlar los tiempos para que esa declaración no se produzca antes de las elecciones europeas. Desde luego no esperan que los socialistas den luz verde por iniciativa propia al trámite antes de que el Congreso apruebe la ley de amnistía, cuyo pleno se baraja para el próximo 30 de mayo. Las próximas semanas serán especialmente tensas para el Gobierno por el incierto resultado de las elecciones catalanas y los equilibrios imposibles con el independentismo, a lo que se suman las trabas en la aplicación de la medida de gracia y la propia campaña de los comicios comunitarios.
En la dirección del Grupo Popular en el Congreso recelan también de que una posible comparecencia por voluntad propia del jefe del Ejecutivo pueda venir acompañada de "otros asuntos" ajenos a las "explicaciones" que Génova le exige por la investigación judicial abierta contra Begoña Gómez, y que finalmente consiga desviar el foco de atención sobre la "presunta corrupción", dicen en el PP, que afecta a su entorno político y familiar. No es la primera vez que el jefe del Ejecutivo mezcla varios temas en una misma comparecencia para dosificar los asuntos más espinosos. Recuerdan, por ejemplo, cómo Sánchez juntó en una misma declaración los pactos europeos sobre energía con el controvertido giro con el Sáhara.
La Mesa del Congreso calificó esta semana la solicitud registrada por el PP. No podía oponerse. Según el Reglamento, cualquier petición de comparecencia debe tramitarse si lo solicitan al menos dos grupos parlamentarios o una quinta parte de los miembros de la Cámara. La cita importante será la del próximo martes, cuando la Junta de Portavoces decida si da luz verde a fijar en el calendario ese escrutinio parlamentario al presidente del Gobierno.
Los tiempos son clave para el PP, porque su objetivo es acentuar el desgaste de Sánchez antes de la cita con las urnas del próximo 9-J. Y aunque el PSOE acepte, puede intentar "retrasar todo lo que pueda" la comparecencia para finales de junio, cuando haya bajado el suflé político. Por ese motivo, el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, ya ha iniciado conversaciones con otros grupos parlamentarios, incluyendo a los socios del Gobierno, para lograr atraerles a su bando y forzar las explicaciones de Sánchez en el corto plazo, antes de que se abran las urnas comunitarias.
Feijóo aspira a quebrar la mayoría de Sánchez con su "plan de choque" en el Congreso
Ana Belén Ramos
Como publicó El Confidencial, Feijóo se ve con opciones de quebrar la mayoría parlamentaria de Sánchez y que formaciones como PNV, ERC o Junts se unan a la presión contra el jefe del Ejecutivo, aprovechando la tensión por los pactos postelectorales tras los comicios de Cataluña. En la dirección del PP no aclaran aún si esas conversaciones han dado sus frutos, aunque fuentes parlamentarias se muestran optimistas. "Es muy posible que algunos se abstengan y faciliten la comparecencia", auguran.
Pase lo que pase en el Congreso, al PP le seguiría quedando el comodín del Senado, donde los de Feijóo cuentan con mayoría absoluta. El líder popular ya advirtió que si Sánchez se escondía o sus socios le "protegían", le llamaría a capítulo en la comisión de investigación de la Cámara Alta. Las fuentes consultadas apuntan también a que si el PSOE opta por la "distracción" y el "ninguneo" en el Congreso y retrasa sine die la comparecencia, el PP estudiaría activar la pieza del Senado para forzar explicaciones antes de las elecciones europeas.
La cita del próximo 9 de junio resulta vital para Feijóo. El líder del PP jugará cara a cara con Sánchez por primera vez desde las elecciones generales. La maniobra del jefe del Ejecutivo con su periodo de reflexión de cinco días ha movilizado, a juicio de Génova, al electorado socialista. Y Feijóo quiere contraatacar para neutralizar su capacidad de aguante en unos comicios de tinte nacional. La presunta implicación de Begoña Gómez en el 'caso Koldo' y su posible vínculo con empresas favorecidas por el Gobierno, entre ellas Air Europa, es un filón de desgaste que el PP no está dispuesto a soltar, y menos de cara a la recta final del ciclo electoral.
"Utilizó a su mujer y a sus hijas para ganar tiempo en su estrategia política y electoral", denuncian en Génova. En la dirección popular siguen sin cerrar la puerta a citar a Begoña Gómez en la Cámara Alta. "Espero que no nos obligue", aseguró Feijóo el pasado martes en esRadio, que sugirió estar dispuesto a dar ese paso si Sánchez no da explicaciones convincentes sobre los vínculos de su entorno familiar con la trama. Además de la ofensiva parlamentaria, el PP ha convocado una gran movilización para el próximo 26 de mayo en Madrid para intentar exhibir el rechazo de la ciudadanía tanto a los "bulos" del Gobierno como a la "presunta corrupción" del PSOE. "No puede caer en el olvido", sentencian.
{getToc} $title={Tabla de Contenidos}