En 2020, Vanessa Springora publicó sus vivencias en las que narraba cómo, cuando tenía 14 años, el autor francés de renombre Gabriel Matzneff, 36 años mayor que ella, se aprovechó de ella física e intelectualmente.
La historia que cuenta la directora Vanessa Filho en El consentimiento no solamente es una historia real, sino que no hace tanto tiempo que sucedió y, sobre todo, que vio la luz y fue juzgada. La película, una dura muestra de la pedofilia que Francia aceptó durante décadas e incluso alabó, narra la historia real de Vanessa Springora, una mujer que, a sus 14 años, fue seducida por el escritor Gabriel Matzneff, 36 años mayor que ella.
Protagonizada por Jean-Paul Rouve y la actriz de 24 años Kim Higelin, el filme adapta las vivencias que Springora narró en su libro homónimo, publicado en 2020, después de una vida en silencio. Con 47 años, la editora decidió denunciar lo que Matzneff había hecho con ella con la misma arma con la que él había logrado su fama, consiguiendo hacerle caer del pedestal en el que Francia lo había colocado sin razón.
¿Quién es Gabriel Matzneff?
A finales de los 80, apareció en Francia el que se convertiría en uno de los escritores más alabados y admirados del país. Nacido en 1936 en Neuilly-sur-Seine, Gabriel Matzneff provenía de una familia rusa emigrada a Francia durante la Segunda Guerra Mundial. Estudió literatura clásica en la Sorbona, aprendió ruso y también epigrafía latina y, tras incorporarse a un regimiento de infantería colonial, volvió a París en 1961, donde empezó a colaborar con diferentes medios de comunicación.
En 1974, publicó Les moins de seize ans (Los menores de dieciséis años), escrito en el que el autor hablaba de su atracción por los jóvenes, llegando a rememorar sus relaciones sexuales y amorosas con chicos y chicas de entre 10 y 16 años. En aquella época, no existían leyes en Francia que impidiesen su publicación y los libros de Matzneff eran vendidos abiertamente, incluso por editoriales de renombre como Gallimard.
Entre 1953 y 2009, publicó la serie Diarios íntimos en la que narraba todos los aspectos de su vida, entre ellos su pedofilia y, en 1977, se publicó en el diario Le Monde una carta abierta (años más tarde, en 2013, Springora afirmó que se trataba de una iniciativa de Matzneff) a favor de la despenalización de relaciones sexuales entre menores y adultos. En 1987 ganó el premio Mottart de la Academia Francesa y, en 2013, el premio Renaudot de ensayo. Matzneff formaba parte de la élite cultural y literaria francesa.
El consentimiento de Vanessa Springora
Fue dos años antes de que la Academia Francesa premiara al escritor cuando este depredador sexual inició su relación con Vanessa Springora, una niña de 14 años. El consentimiento no es un título puesto a la ligera: Matzneff era experto en lo que él llamaba el "arte de amar" y conseguía que los niños y niñas menores de edad acabasen prendados de él, lo que hacía que creyesen querer mantener esas relaciones amorosas y sexuales con él.
La película de Filho, coescrita con la propia Springora y basada en su novela, muestra cómo la futura editora y escritora cayó en las garras de Matzneff, quien insistía en mantener relaciones con ella. ¿Cómo puede ser malo alguien tan culto y tan admirado por la sociedad del momento? Ajena a las novelas sobre vivencias pedófilas propias del escritor, Springora cayó en el engaño del autor, hasta que, a medida que fue creciendo, se fue dando cuenta de lo que realmente estaba pasando.
En 2019, tras una vida viendo como se alababa al escritor, quien incluso había aparecido en el programa de Bernard Pivot Apostrophes explicando cómo conseguía seducir a niños de entre 10 y 15 años, Springora decidió publicar el abuso sexual al que estuvo sometida durante su adolescencia en un libro que se convirtió en un éxito de ventas y que no solo ayudó a destapar lo que Francia había estado ignorando hasta el momento, sino que animó a otras víctimas a pronunciarse.
La denuncia por pedofilia de Francesca Gee
El 2 de abril de 2020, The New York Times publicó el artículo La víctima de un escritor pedófilo, silenciada desde hace tiempo, por fin cuenta su historia. Se trataba de Francesca Gee, otra de las niñas que sufrieron el abuso de Matzneff. La noticia comenzaba con la descripción de un día de otoño de 1983 en París cuando, al pasar por delante de una librería, una amiga de Gee le comentaba: "¡Mira, eres tú!". Se trataba de la portada del libro Ivre du vin perdu (Ebrio de vino malogrado).
Cuando tenía 15 años, Gee había iniciado una relación de tres años con el escritor y este, una década después, había decidido utilizar su fotografía para la portada de su libro sobre la pedofilia, en el que mostraba las cartas que ella ... {getToc} $title={Tabla de Contenidos}