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Santiago Abascal aprovechó la polémica en torno a Pedro Sánchez y su continuidad para alargar el pulso electoral con el PP. El líder de Vox compareció ante los medios tras el anuncio del presidente del Gobierno para exigir a Alberto Núñez Feijóo que rompa cualquier contacto o negociación con el PSOE y colabore en una alternativa conjunta. "Esperamos que otros se decidan a contribuir en este esfuerzo sin el más mínimo atisbo de colaboración con un autócrata enrabietado y desatado", declaró Abascal, que al igual que Sánchez no aceptó preguntas de los periodistas durante su intervención.
El líder de la formación ultraconservadora habló dos horas después de que el presidente del Gobierno resolviera la incógnita sobre su futuro. Abascal, en su tono habitual, fue muy crítico y alertó de la "amenaza" de Sánchez a "todo disidente", personificado en los jueces, los medios de comunicación críticos y la oposición política. "Lo peor de Sánchez está por llegar", dijo, tras acusar al dirigente socialista de "atizar el enfrentamiento social" y alimentar la "división" entre los españoles. "Es una reafirmación de su golpe contra la unidad, la convivencia, el Estado de derecho, la separación de poderes y la libertad de prensa", añadió Abascal.
El discurso de Santiago Abascal, de apenas unos minutos, profundizó en la teoría de que el PP ejerce una oposición tibia a Pedro Sánchez, con predisposición a posibles pactos. Vox, en ese sentido, exige romper la negociación para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), si bien los contactos entre el Ejecutivo y los populares están en punto muerto desde hace meses y sin visos de prosperar, pese a la mediación de la Comisión Europea. La reclamación es extensible a cualquier contacto o acuerdo entre el primer y el segundo partido en número de escaños, como ya pidió con asuntos como la reforma del artículo 49 de la Constitución.
"En este escenario extremo, provocado por un aprendiz de tirano, es exigible a la dirección nacional del Partido Popular que rompa toda negociación, muy especialmente en el Consejo General del Poder Judicial, y que rompa cualquier tipo de acuerdo con el Gobierno de Pedro Sánchez. Que se sume a la denuncia nacional e internacional que Vox lleva haciendo mucho tiempo en solitario y que se comprometa a romper de una vez por todas la alianza, hoy vigente, entre el Partido Popular y el Partido Socialista en Europa", subrayó Abascal.
El presidente de Vox, que considera que Sánchez actúa por su "interés personal", censuró el "teatro burdo, indignante y victimista" de los últimos cinco días y criticó que haya utilizado al rey Felipe VI en su maniobra. "Solo nos queda trabajar para minimizar el daño a los españoles y construir una alternativa que sea viable", declaró Abascal, tras denunciar la "corrupción económica" del Gobierno del PSOE y Sumar. "Ha llamado a una movilización social golpista de sus aliados y acólitos y llamando a la movilización y una supuesta regeneración democrática dirigida, en realidad, contra los jueces independientes, los medios libres y contra la oposición", añadió.
El alegato de Santiago Abascal arenga a su electorado a apenas dos semanas para los comicios en Cataluña y a poco más de un mes de las elecciones europeas del 9 de junio, donde el partido ultraconservador ha depositado grandes expectativas para reponerse de los últimos fiascos y sus terremotos internos. La tensión política es máxima tras el inesperado movimiento de Pedro Sánchez, que la semana pasada canceló su agenda pública y dejó en el aire su continuidad tras las publicaciones de El Confidencial que desvelan los contactos de su esposa, Begoña Gómez, con empresarios beneficiarios de adjudicaciones millonarias del Gobierno.
El dirigente socialista, tras cinco días de reflexión, confirmó su continuidad este lunes y envió un mensaje grabado y sin preguntas de los periodistas para movilizar a una "mayoría social" en torno a él y frente a la "ultraderecha". "Que la mayoría social, como ha hecho estos cinco días, se movilice en una apuesta decidida por la dignidad y el sentido común, poniendo freno a la política de la vergüenza que llevamos demasiado tiempo sufriendo", subrayó Sánchez.
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