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José Luis Ábalos diferenció este jueves la compra de mascarillas del Ministerio de Transportes de la realizada por el Gobierno de Baleares de Francina Armengol. Si bien las dos operaciones se firmaron durante la pandemia con la mercantil Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas SL, vinculada a la trama de comisiones ilegales de Koldo García Izaguirre, el exdirigente socialista señaló que en su caso no hubo "quebranto para las arcas públicas", mientras que con el Govern de las islas, sí. "Eso es estafa", declaró el exministro en una entrevista con Cuatro.
El contrato de 3,7 millones de euros para la compra de material sanitario en Baleares es una de las ramificaciones del caso Koldo. Las presuntas irregularidades apuntan a que las mascarillas suministradas en 2020 por la empresa investigada eran defectuosas, con un valor de 2,6 millones de euros, pero el Ejecutivo de Armengol, ahora presidenta del Congreso de los Diputados, no lo reclamó hasta pasados tres años. Lo hizo cuando intervino la Fiscalía y justo antes de que se hiciera el cambio de Gobierno en las islas, con la llegada del PP.
El exministro de Transportes, ya fuera del PSOE y repudiado en el Grupo Mixto, explicó durante una hora en Cuatro las informaciones que apuntan hacia él como parte importante de la trama. Ábalos, que negó cualquier responsabilidad y reiteró que no está acusado de nada, puso el foco en la compra de Baleares. “Esas tuvieron que haberse repuesto, las del ministerio no”, declaró el diputado, en alusión al material que estuvo almacenado durante años porque no servía. En concreto, mascarillas del tipo FFP2 que no estaban homologadas.
El juez señala a José Luis Ábalos como "intermediario" de la trama de Koldo
Pablo Gabilondo
José Luis Ábalos, aunque reconoció que "no tiene ni idea" del contrato suscrito en las islas, comparó su situación con la del Ayuntamiento de Madrid, que fue víctima de una presunta estafa en la compra de material durante la pandemia, con un quebranto para las arcas municipales de 6 millones de euros, sin responsabilidad del equipo de Gobierno de José Luis Martínez-Almeida y pendiente de juicio, con Luis Medina y Alberto Luceño como principales acusados.
El sumario del caso apunta a la participación de Ábalos en la operación de Baleares. Como informó este diario, el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno sostiene que el exministro de Transportes actuó como "intermediario" de la trama de Koldo García Izaguirre para tratar de frenar una reclamación del gobierno de Baleares a Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas SL, que se llevó más de 52 millones de euros en contratos públicos durante 2020 en la compra de material.
Ábalos, tras conocerse el contenido de esta resolución, negó durante la entrevista cualquier implicación en la trama o mediación con el Gobierno de Baleares. "¿Pero qué pasa, que yo también sirvo de interlocutor con el Partido Popular de Baleares, tanta capacidad tengo? Mucha fantasía es", declaró el exministro. "Ni de coña. Ni antes, ni después, ni durante, ni nunca", reiteró, en alusión a su supuesta connivencia con el actual Ejecutivo, encabezado por Marga Prohens.
Relación con Koldo
El que también fuera secretario de Organización con el PSOE evitó confrontar con el partido tras su abrupta salida y negó cualquier tipo de venganza. Ábalos escenificó de nuevo su lamento por dejar la formación en el que ha militado durante más de 40 años, al borde del llanto y con la voz entrecortada. "¡Qué pena!", dijo apesadumbrado. El exministro, aunque lanzó varios dardos a Pedro Sánchez durante su comparecencia del lunes, aseguró que no actuará contra nadie por despecho. "No tengo manta. El que tiene manta es el que fabrica mantas", añadió.
José Luis Ábalos reconoció que sabía de la investigación abierta contra su asesor y mano derecha, Koldo Izaguirre, aunque le sorprendieron las detenciones de la semana pasada. El exdirigente explicó que en la actualidad le ha bloqueado de WhatsApp, aunque evitó citar cuándo fue su última conversación. "No estoy en un tribunal", se defendió durante la entrevista en Cuatro.
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