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La Aemet ya tiene su predicción para quienes pensaban que julio acabaría sin sobresaltos. Aunque el calor seguirá apretando en buena parte del país, no se descarta que más de una tarde termine con cielos encapotados, truenos y algún chaparrón.
Tormentas puntuales y calor intenso marcarán la recta final de julio, según la última predicción semanal publicada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Aunque el ambiente será, en general, seco y soleado, las tormentas no desaparecen del radar: podrían surgir con fuerza en puntos del norte y del este de la Península.
La semana del 21 al 27 de julio llega con una marcada dualidad térmica. Mientras el sur peninsular sufrirá temperaturas por encima de lo habitual —con máximas destacadas en Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha—, el norte vivirá jornadas más frescas de lo normal para esta época del año. Esta semana será mayormente estable, pero no se descarta que alguna tarde termine con aguacero inesperado en zonas montañosas del norte y del este.
De cara a la semana del 28 de julio al 3 de agosto, la Aemet advierte que la incertidumbre es alta, pero ya se vislumbra una nueva subida térmica. El calor podría intensificarse especialmente en el oeste y el centro del país, mientras que en el este y Baleares se espera una situación más variable, con posibles episodios tormentosos, aunque también localizados y breves.
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L. A.
Los primeros días de agosto seguirán la misma tónica veraniega: calor contenido y ambiente seco en la mayoría del territorio. Sin embargo, las tormentas no desaparecerán del todo. Se mantiene la probabilidad de que aparezcan en puntos del este peninsular, especialmente durante las tardes, cuando el calor y la humedad actúan como caldo de cultivo.
Aunque no estamos ante un panorama de lluvias generalizadas, sí se recomienda estar atentos a los avisos meteorológicos locales, ya que estas tormentas pueden desarrollarse de forma repentina y con cierta intensidad, afectando tanto al tráfico como a eventos al aire libre o excursiones.
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