Este municipio de Galicia que limita con Portugal tiene centro de salud, farmacias y está cerca de Vigo y Ourense
El número de jubilados europeos y de fuera del continente que se viene a vivir a España sigue creciendo. Las personas mayores de 65 años encuentran en nuestro país un entorno ideal para disfrutar de la pensión con una jubilación activa y tranquila. Factores como el clima templado, la rica oferta cultural y una red de servicios que favorecen el bienestar convierten a regiones como Cataluña, Andalucía o Galicia en puntos clave para esta época. Además, la gastronomía y la conexión con la naturaleza hacen de muchas partes del país una buena elección para quienes buscan calidad de vida durante su jubilación.
El pueblo con el precio más asequible
Muchas personas buscan mudarse durante esta época a otras provincias como Pontevedra, pero sin vivir en la capital o en municipios muy grandes, ya que estas suponen un gasto mayor y, por norma general, una vida más agitada. Ejemplo de ello son los altos precios de la vivienda que hay en ciudades como Sanxenxo (2.862 euros/m2), Pontevedra (2.185 euros/m2), Vigo (2.246 euros/m2) o Nigrán (2.319 euros/m2).
Sin embargo, hay otros municipios con cifras inferiores que pueden ser una opción ideal para los jubilados. Según el último informe de Idealista, el pueblo pontevedrés con el coste de la vivienda más bajo es Arbo, que cuenta con un precio medio del metro cuadrado de 499 euros y además tiene 2.636 habitantes, por lo que cuenta con un ambiente mucho más familiar y cercano que otras partes de la comunidad autónoma.
Arbo es conocido por sus vinos y por productos y platos típicos como la lamprea, que forman parte de su tradición gastronómica. Este municipio bañado por los ríos Miño, Deva y Cea cuenta con un gran encanto y vida rural, pero sin renunciar a una buena infraestructura de servicios y comunicaciones. Limitando con Portugal y muy próximo a otras ciudades de Galicia, se convierte en una opción ideal para tener una buena calidad de vida durante la jubilación.
Esta localidad se posiciona como una potente alternativa para quienes buscan un entorno sosegado y lejos del bullicio urbano, pero estando conectado con ciudades como Vigo y Ourense, de las que se encuentra a unos 50 minutos. Además, dispone de una estación de tren, un puente internacional que lo conecta con el municipio portugués de Melgaço, farmacias, centro de salud, comercios y un clima templado caracterizado por unas temperaturas suaves.
{getToc} $title={Tabla de Contenidos}