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Un curso exclusivamente para hombres que incluye clases de cocina saludable, instrucciones para poner la lavadora y para planchar después la ropa. Es lo que propone la Unidad para la Igualdad de la Universidad de Sevilla en una iniciativa de su centro de formación permanente y que lleva bajo título Construyendo masculinidades corresponsables en las tareas de cuidado y del hogar. La iniciativa debía comenzar este lunes con el primero de los cinco cursos teórico prácticos. Cada uno tiene un coste de 12 euros y están dirigidos a alumnos, profesores y personal de administración y servicios de la Hispalense.
"La verdadera corresponsabilidad pasa por que los varones se impliquen en las tareas domésticas y de cuidado, pero nadie les ha enseñado a hacerlo", defiende la entidad en la web que sirve para presentar este programa, que cuenta con financiación de la Consejería de Inclusión Social de la Junta de Andalucía. Este mismo lunes, la titular del ramo, Loles López, ha presentado en Cádiz una nueva edición de una campaña sobre corresponsabilidad que cuenta con fondos del Ministerio de Igualdad. La dirigente popular ya lanzó esta misma iniciativa hace semanas a apenas unos metros de la sede de la Universidad de Sevilla y con Juanma Moreno como modelo mientras planchaba en una instalación colocada en pleno centro de la capital andaluza.
Ahora la Junta abunda en esta idea con una versión estival que defiende que "todo familiar tiene derecho a mimar a los peques y darle gloria bendita a los abuelos en verano". El leitmotiv de la campaña de la Junta va de la mano de la iniciativa de la Universidad de Sevilla, ya que ambos proyectos ponen el foco en la corresponsabilidad, aunque el curso de la Hispalense parte de que los hombres no siempre conocen estos saberes "necesarios para una persona adulta funcional".
El "programa de formación" incluye prácticas para que los inscritos aprendan a coser, lavar, planchar y cocinar mientras los participantes "reflexionan con otros hombres sobre los roles de género y las experiencias desde las que se construye la masculinidad". Según la web de la US, las clases para aprender estas labores serán "contenidos literales de aprendizaje" pero incluyen una carga metafórica para reflexionar sobre las "heridas de género que hay que coser", las relaciones "que hay que cocinar día a día de forma creativa" o "lo que tenemos que lavarnos y plancharnos para potenciar el autocuidado y el cuidado de seres queridos".
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La propuesta de la US cuenta con financiación del Gobierno central y del autonómico y la colaboración de la Fundación Iniciativa Social y el Instituto de Sexología Al-Andalus. La directora de la primera etapa del curso es la doctora María Teresa Padilla, del departamento de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación de la Hispalense. Este primer curso debía haber comenzado este lunes y tenía un contenido más teórico, pero ha sido trasladado a septiembre, igual que el resto. Sus objetivos eran analizar los modelos de masculinidades y el análisis de los roles de género y la formación para ejercer una masculinidad corresponsable.
"El ámbito del hogar ha sido un espacio tradicionalmente reservado a las mujeres", admite la Universidad de Sevilla en la presentación del curso, que defiende que todavía existe un sesgo en la educación de "las criaturas". "El aprendizaje de ciertas tareas domésticas se transmite más decidida y sistemáticamente de madres a hijas", expone el escrito para justificar el curso, que afirma que hay "pocos" varones que han aprendido de sus madres "los conocimientos necesarios" para ser una "persona adulta funcional en el autocuidado y en el cuidado de las demás personas".
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El curso parte de la base de que la educación formal "siempre ha ignorado los saberes y aprendizajes propios del mundo reproductivo", ya que el currículo escolar "basa la educación en los aprendizajes propios del mundo productivo". La visión de los organizadores de la iniciativa es que la enseñanza de este tipo de asuntos ha estado a cargo de las mujeres, una situación que se ha agravado con la incorporación de la mujer al mercado laboral. "Y esto no ha venido acompañado por la incorporación de los hombres al hogar", lamenta la Universidad de Sevilla en su web.
"No podemos esperar que los hombres asuman su responsabilidad en el cuidado si realmente no están formados para ello, si se han incorporado de forma acelerada impulsados por la necesidad", defiende la Hispalense, que afirma que el hecho de incluir este tipo de formaciones en la oferta de la US les concede un "rango superior" y sirve para "legitimarlas". El curso rechaza también que la conciliación se traduzca en "desplazar el papel del varón a entidades y servicios que asumen lo que no pueden hacer las mujeres", en alusión a los servicios de limpieza de hogar o las guarderías para el cuidado de los hijos.
Una vez que se den las clases teóricas, el curso abordará el uso de la lavadora y la plancha y lo combinará con el cuidado emocional "de uno mismo" y el cuidado de las "personas queridas", en "alusión a criaturas y familiares dependientes". El siguiente turno tratará sobre la negociación en pareja, la ayuda en "la gestión del tiempo de las criaturas" y las "habilidades de organización del hogar", mientras que el tercer tramo abordará la cocina saludable bajo el nombre "Cocinar algo más que macarrones: sexo y cuidados". Además de los fogones, profundizará en "cuidar la relación de pareja y la sexualidad" y "tipos de apego y cuidados". En la última fase los hombres participantes recibirán un curo básico de costura mientras aprenden sobre "heridas de género" y "gestión de conflictos familiares".
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