
El OnePlus ACE 3 Pro apuesta por el equilibrio: rendimiento potente, batería generosa y una pantalla que brilla con luz propia. Un gama alta que va directo al grano.
A veces, elegir un móvil se convierte en una cuestión de prioridades: diseño, cámara, batería o precio. Algunos destacan en un aspecto concreto, mientras otros intentan mantener el equilibrio sin pasarse de presupuesto. Y, de vez en cuando, aparece un modelo que, sin grandes alardes ni campañas llamativas, cumple con nota en casi todo lo importante.
Si lo que buscas es potencia sin sacrificios, autonomía prolongada y un uso fluido incluso con apps exigentes, hay modelos que sorprenden por lo que ofrecen frente a su coste. No hablamos de móviles recortados ni de alternativas de entrada, sino de opciones que rozan la gama alta sin alcanzar sus precios estratosféricos.
Uno de esos casos es el OnePlus ACE 3 Pro, disponible en AliExpress por unos 316 euros. Se trata de una versión china con ROM global ya instalada, lo que asegura compatibilidad con servicios de Google y permite seleccionar español como idioma principal.
Potencia, batería y pantalla: lo tiene todo bastante bien atado
A nivel de rendimiento, este OnePlus no se queda corto. Integra el chip Snapdragon 8 Gen 3, uno de los más potentes actualmente, que permite jugar, editar o hacer multitarea de forma ágil y sin ralentizaciones. Está acompañado de configuraciones de hasta 24 GB de RAM LPDDR5X y almacenamiento UFS 4.0, lo que se traduce en velocidad y fluidez en prácticamente cualquier uso.
La batería también juega a otro nivel. Con sus 6.100 mAh, ofrece autonomía de sobra para aguantar el día sin preocuparse demasiado por el cargador. Además, si necesitas energía en poco tiempo, cuenta con carga rápida de 100 W, capaz de recuperar el dispositivo en cuestión de minutos. Ideal si sueles ir con prisas o usas el móvil de forma intensiva.
Otro de sus puntos destacados es la pantalla AMOLED LTPO de 6,78 pulgadas, que combina una buena resolución (1.5K), hasta 4.500 nits de brillo máximo y una tasa de refresco dinámica de hasta 120 Hz. En la práctica, eso significa colores vivos, buen comportamiento bajo el sol y una experiencia visual muy cómoda, tanto viendo series como navegando o leyendo.
Detalles extra y consideraciones antes de lanzarse
En el apartado fotográfico, viene bien equipado para su rango de precio. El sensor principal es un Sony IMX890 de 50 megapíxeles con estabilización óptica, acompañado por un ultra gran angular de 8 MP y un sensor macro de 2 MP. La cámara frontal, de 16 MP, es más que suficiente para selfies o videollamadas con buena luz.
No faltan conexiones modernas: es compatible con 5G, tiene WiFi 7, Bluetooth y USB-C, además de doble SIM. Eso sí, hay que señalar que no incluye NFC, lo que puede ser relevante para quienes usan pagos móviles con frecuencia. También cuenta con certificación IP65, lector de huellas bajo la pantalla y una función que permite usarlo con los dedos mojados, algo útil en días de lluvia.
Por último, conviene recordar que esta es una versión importada. Aunque viene adaptada con idioma en español y acceso a la Play Store, algunos servicios pueden no funcionar con la misma fiabilidad que en modelos internacionales. A cambio, se obtiene un teléfono con especificaciones propias de un gama alta, por un precio que lo sitúa en otra liga. Para quienes priorizan el rendimiento por encima de otros factores, puede ser una opción muy atractiva.