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Santiago Abascal no clavó una pica en Flandes, pero sí en Washington DC. El líder de Vox ha exprimido al máximo su condición de invitado a la investidura del 47º presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Abascal ha reforzado estos días las relaciones internacionales de su formación y su papel como portavoz internacional de Patriots, el grupo parlamentario europeo que preside y del que forman parte Marine Le Pen y Viktor Orbán. Sinergias internacionales con las que Vox prepara un terreno político que trasciende fronteras, y que se juega en clave "patriotismo versus globalismo".
La agenda internacional juega un papel clave para el líder de Vox. Un elemento que ha sido impulsado a iniciativa del propio Abascal a través de la Fundación Disenso. Los frutos de lo sembrado se han podido ver estos días en su viaje a la capital norteamericana, a la que ha acudido acompañado del eurodiputado Hermann Tertsch, del director de comunicación de Vox, Álvaro Zancajo, y el director de Disenso y eurodiputado, Jorge Martín Frías.
Entre sus encuentros más mediáticos se encuentra el intercambio de palabras que Abascal ha mantenido con el periodista Tucker Carlson, uno de los comunicadores de cabecera de Trump más conocidos a nivel mundial. En un vídeo al que ha accedido en exclusiva El Confidencial se ve cómo ambos se saludan amistosamente en uno de los actos previos a la investidura del presidente norteamericano. La entrevista que Carlson hizo a Abascal ha superado los 11 millones de visualizaciones, y fue a través de la que el magnate Elon Musk conoció al político español. "Muchos temas interesantes", comentó al respecto el CEO de Tesla.
Otro de los greatest hits de la travesía americana de Abascal fue su encuentro con Javier Milei, presidente de Argentina, quien profesa un gran cariño por el líder de Vox. Se encontraron en primer lugar la noche del sábado en el Hispanic Inaugural Ball, la tradicional gala previa al juramento del nuevo presidente. Este periódico ha podido confirmar que no fue el único encuentro que mantuvieron ambos. La noche del domingo tuvo lugar la Gala 1775, otro de los actos previos a la investidura de Trump, pero en un entorno más selecto y reducido. "Había treinta mesas", señala una fuente presente en el acto.
En dicho encuentro, celebrado en el Museo de la Biblia, Milei recibió el premio al 'Campeón de la Libertad Económica'. "Para nosotros la libertad es el valor supremo y, como tal, queremos hacer de la Argentina el país más libre del mundo", aseveró en su discurso. Abascal fue uno de los invitados a este evento, y tuvo ocasión de saludar nuevamente a Milei. "Siempre es un placer verte", repitió el mandatario argentino en tono afectuoso.
Abascal fue uno de los primeros en apostar políticamente por Milei. Su amistad se remonta a 2020, cuando acude a la llamada del Foro Madrid para firmar la Carta de Madrid, una alianza de políticos "en defensa de la libertad y la democracia en la Iberosfera". En aquel tiempo, Milei era muy desconocido fuera de las fronteras argentinas, y carecía de partido político ('La Libertad Avanza' se fundaría en 2021).
Entre las personalidades con las que ha mantenido conversaciones Abascal se encuentran el fiscal de Texas, Ken Paxton, muy próximo a Trump; el general Michael Flynn, ex consejero de Seguridad Nacional de Trump; el presidente de Paraguay, Santiago Peña; Sean Duffy, que estará al frente del área de Transportes de Trump, y su mujer la presentadora Rachel Campos-Duffy.
Uno de los encuentros más sonados fue el de Abascal y Terstch con el excampeón mundial de la UFC Connor McGregor. "Nos lo encontramos en uno de los eventos dentro de la ronda previa a la investidura. Hubo una afinidad total. Muy buen rollo", señala una fuente presente en el momento en que se conocieron.
Siempre FIGHT!FIGHT!FIGHT!@TheNotoriousMMA 🇪🇸🇺🇸🇮🇪#WashingtonDC pic.twitter.com/Ei0jslU276
— Santiago Abascal 🇪🇸 (@Santi_ABASCAL) January 19, 2025
El líder de Patriots también ha mantenido encuentros con algunos de los think tanks de mayor influencia en el ala conservadora a nivel global, como la Heritage Foundation o el Hudson Institute. "Es un honor contar con la amistad generosa de Kevin Roberts, presidente del buque insignia del pensamiento conservador en EEUU, la Heritage Foundation", manifestaba Abascal en Twitter.
Abascal y su comitiva también han acudido a un encuentro de Foster's Outriders, un grupo o iniciativa relacionado con la memoria y el legado de Foster Friess, un destacado empresario y filántropo estadounidense conocido por su apoyo a causas conservadoras y cristianas en los Estados Unidos. Es uno de los mayores donantes del Partido Republicano. Este tipo de encuentros suelen estar orientados a reunir a personas que comparten ideales y que están involucradas en proyectos políticos, sociales o culturales, particularmente en el contexto de una nueva administración presidencial. En el marco de esta organización, Abascal ha intercambiado unas palabras con el exsenador Rick Santorum.
A las puertas del Capitolio
Estaba previsto que Abascal y su equipo asistieran al acto de investidura de Trump en la explanada exterior al Capitolio habilitada para ello. Sin embargo, el Departamento de Estado ha alegado motivos climáticos para que los únicos asistentes permitidos fueran los que se encontraban dentro del salón. El líder de Vox y sus acompañantes han seguido el acto desde la Heritage Foundation. Algunas voces apuntan a este periódico que la decisión del Gobierno de mantener vacía el área anexa al Capitolio responde a razones de seguridad. "En EEUU ha ganado la revolución del sentido común. Ganará en España también", ha sentenciado Abascal en X tras la ceremonia.
Patriotismo versus globalismo
Patriotismo versus globalismo. La palestra política se encamina a un uno contra uno en el que Santiago Abascal tiene claro el bando del que forma parte. Sus gurús llevan años avisando de la buena nueva; el cambio en el tablero internacional es imparable y España, eternamente bipartidista, no será ajena a esta nueva ola. Hasta la fecha, España y Portugal parecen esas inexpugnables aldeas galas de Astérix y Obélix, ajenas a los cambios internacionales. El ascenso de Le Pen en Francia, de Orbán en Hungría, de la AfD en Alemania, de Trump en Estados Unidos y de Milei en Argentina no se corresponden con el lugar que ocupa Vox en el hemiciclo español. "Paciencia", es la palabra más repetida en la sede del partido en la Calle Bambú.
Abascal asiste en Washington a la cena de gala hispana previa a la investidura de Trump
EFE
Las encuestas empiezan a dar la razón a los fontaneros de Vox. El partido mejora sus resultados y en algunas localidades como Murcia, se acercan a un sorpaso al PSOE como segunda fuerza. El marco ha cambiado, y Pedro Sánchez lleva tiempo preparando este terreno de juego con una nueva dualidad marca de la casa: ultraderecha o democracia. El presidente quiere erigirse en la resistencia -también marca de la casa- frente a la "ola reaccionaria". En este marco, Vox ha impulsado su agenda internacional en los últimos años a voluntad del propio Abascal, que apostó por la creación de la Fundación Disenso no solo como fábrica de ideas, sino como entidad que impulse el papel de la formación española en el mundo.
El trabajo de estos últimos años en Disenso es claro en el despliegue internacional de Abascal, y ha tenido su máximo exponente en el reciente viaje a Estados Unidos, invitado a la investidura de Donald Trump en calidad de presidente de Patriots. El movimiento de Vox desde el grupo parlamentario europeo ECR a Patriots fue entendido como un acercamiento a Putin, aunque desde el partido siempre han defendido que su intención fue montar una gran "alianza de patriotas". De hecho, Abascal mantiene los buenos lazos con Giorgia Meloni, primera ministra italiana y líder de ECR, una labor de pegamento esencial para estas fuerzas en el hemiciclo europeo.
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