El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha negado esta tarde de manera tajante todas las acusaciones de Víctor de Aldama, el comisionista de la trama Koldo: "En lo que respecta a mí, al Gobierno y al PSOE es categóricamente falso".
En su declaración a petición propia ante el juez el empresario declaró que el presidente del Gobierno pidió conocerlo y le agradeció "todo lo que estaba haciendo", como supuesto conseguidor del Gobierno. Le avisaron para que acudiera a un acto del partido porque quería verle y "hablar con él". Sánchez ha ironizado sobre este relato: "Menuda inventada". "Poco menos que yo estaba esperando a que llegara este señor al mitin para poder hacerlo".
El presidente ha comparecido en el patio del Congreso, después de que el Ejecutivo haya sacado adelante la reforma fiscal, empañada este jueves por la testifical de Aldama. Inmediatamente después de conocer su contendido, el PSOE anunció que emprendería acciones judiciales.
Pero Sánchez ha querido salir también al paso para opinar, dijo, sobre "este personaje". "Las declaraciones de un presunto delincuente que está en prisión preventiva, que ha salido para testificar ante la Audiencia Nacional, pues me merece el crédito que tiene. Ninguno", remarcó.
Según el presidente, tendrá que ser el señor Aldama "quien pruebe esas insinuaciones y esas acusaciones". Yo, destacó, "les puedo garantizar que estamos tranquilos". Si ha demostrado algo, precisamente es que su estrategia de defensa es la mentira". Si lo hace, subrayó, seguro que es "para desviar la atención, sembrar dudas y tapar lo que aparentemente parecen unas ciertas actividades delictivas por parte de esta persona".
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