Cambio del precio de la bombona de butano en España: estas serán las tarifas a partir de ahora
Los repartidores de butano han decidido ir a la huelga a partir del 5 de noviembre, situación que afectará a más de seis millones de hogares en toda España. La Federación Española de Distribuidores de Gases Licuados del Petróleo (FEDGLP) ha convocado estos paros como medida de presión para exigir la actualización de la normativa que regula su actividad. Denuncian que las condiciones actuales les obligan a trabajar a pérdidas, lo que pone en peligro tanto su subsistencia como la continuidad del servicio de reparto a domicilio.
El conflicto surge principalmente por la falta de una actualización en la retribución que los transportistas reciben por cada bombona entregada, una tarifa que no ha sido revisada en más de una década. Con la implementación del Real Decreto-Ley 11/22 para proteger a los consumidores frente a la crisis energética, el Gobierno fijó el precio máximo de la bombona en 19,55 euros. El sector demanda una actualización urgente de la Orden IET/389/2015, lo que permitiría mantener a España como el mercado más asequible de Europa, asegurando además la calidad del servicio de reparto a domicilio.
📢ULTIMA HORALos trasportistas distribuidores de #butano han acordado por unanimidad un calendario de paros en el reparto de bombonas, que se iniciará el 5 de noviembre, lo que afectará al suministro de 150.000 bombonas/día👉En breve publicamos el calendario de fechas del paro pic.twitter.com/eH0RJMeQbO
— FENADISMER (@fenadismer) October 21, 2024
Durante este tiempo, los costos operativos de las distribuidoras han aumentado significativamente, impulsados por la inflación, el encarecimiento del combustible y las normativas en materia de seguridad y bajas emisiones. Además, los distribuidores afirman que el Ministerio de Transición Ecológica no ha atendido sus reiteradas solicitudes para ajustar las tarifas, lo que ha agravado la crisis en el sector.
Las principales petroleras, como Repsol y Cepsa, que controlan el suministro de gas butano, también son señaladas por los transportistas como responsables del deterioro de la situación. Los repartidores argumentan que las grandes empresas han impuesto condiciones insostenibles que les obligan a cubrir rutas y servicios que no generan beneficios, impactando no solo a los pequeños empresarios, sino también a los consumidores que dependen de las bombonas de butano para sus necesidades energéticas.
Calendario de huelga y afectaciones
Los paros temporales están previstos para los días 5, 13, 21 y 29 de noviembre, así como los días 5, 11, 17 y 23 de diciembre. Durante estos días, el reparto de bombonas a domicilio quedará suspendido, afectando tanto a hogares particulares como a empresas. Sin embargo, se garantizará el suministro a puntos de venta y se harán excepciones en el caso de centros educativos, sanitarios, de atención social, residencias de mayores y usuarios en situación de vulnerabilidad social.
🤔QUIERES CONOCER EL CALENDARIO DE PAROS EN EL SUMINISTRO DE LAS BOMBONAS DE BUTANO?Los distribuidores han anunciado que desde el 5 de Noviembre dejarán de repartir las 150.000 botellas que diariamente entregan en más de 6 millones de casasAquí todo⬇️https://t.co/gPaEWXXE9A
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Este calendario de paros ha sido confirmado por la FEDGLP, que insiste en que la huelga continuará hasta que se produzca una actualización de las condiciones económicas del sector, algo que ha puesto en alerta a millones de familias que dependen del gas butano para cubrir sus necesidades diarias de calefacción y cocina. Según las estimaciones de la FEDGLP, alrededor de 150.000 bombonas se distribuyen diariamente en todo el país, una cifra que se verá drásticamente reducida durante los días de huelga. Esta situación se suma a las dificultades que ya enfrentan muchos hogares, especialmente los más vulnerables, que dependen de este suministro esencial.
Los paros temporales están previstos para los días 5, 13, 21 y 29 de noviembre, así como los días 5, 11, 17 y 23 de diciembre
El impacto de la huelga también se extiende a las pequeñas y medianas empresas que realizan el reparto, entre 170 y 200 pymes que, de no resolverse este conflicto, podrían verse abocadas al cierre, lo que supondría la pérdida de más de 3.500 empleos directos. Las negociaciones con el Ministerio y las grandes petroleras continúan, pero, hasta el momento, no se ha alcanzado ningún acuerdo que alivie la crisis que atraviesa el sector.
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