En una operación por sorpresa, destruyó en tierra la casi totalidad de la aviación militar de Egipto.
Dos cadenas de explosiones de miles de aparatos de comunicación de Hezbolá han dejado decenas de muertos en el Líbano. Las detonaciones de buscas y walkie-talkies han sembrado la incertidumbre en las filas de la milicia chií, que se siente vulnerable como nunca. Aunque Israel no ha reivindicado la autoría, en aquel país ya se compara el ataque con la operación Moked de junio de 1967.
En aquella jornada, en el inicio de la guerra de los Seis Días, la Fuerza Aérea israelí destruyó la mayor parte de la fuerza aérea egipcia. Apenas empleo cuatro horas en ello y acabó con la capacidad aérea de Egipto y Siria. Fue la operación Foco, Moked en hebreo. De esa manera Israel logró una ventaja decisiva en aquella contienda. Muchos historiadores lo consideran el día que cambió el panorama político de Oriente Medio.
La guerra entre Israel y sus vecinos árabes
La guerra de los Seis Días enfrentó a Israel con una coalición árabe formada por Egipto, Siria, Jordania e Irak entre el 5 y el 10 de junio de 1967. Fue parte del conjunto de guerras libradas entre Israel y sus vecinos árabes tras la creación del Estado de Israel en 1948.
Antes, en 1956, tuvo lugar la Crisis de Suez (o guerra del Sinaí), cuando Israel invadió Egipto por el cierre egipcio de los corredores marítimos a los navíos israelíes. Aquello acabó con la reapertura de los Estrechos de Tirán a Israel, así como con el despliegue de la Fuerza de Emergencia de las Naciones Unidas (FENU) a lo largo de la frontera entre ambos países.
La tensión volvió a aumentar en 1967. Israel reiteró su posición de que otro cierre egipcio de los Estrechos de Tirán a sus barcos llevaría a un conflicto bélico. En mayo, el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser anunció que sí, que volverían a estar cerrados a los buques israelíes. Luego, movilizó al ejército en líneas defensivas a lo largo de la frontera con Israel y ordenó la retirada inmediata de todo el personal de la FENU de la península del Sinaí.
Egipto reunió 1.000 carros de combate y unos 100.000 soldados en la frontera con Israel y cerró los estrechos a todo barco de bandera israelí o que llevara materiales estratégicos a Israel. Tel Aviv respondió con una movilización similar que incluyó el reclutamiento de 70.000 reservistas para aumentar el número ordinario de las Fuerzas de Defensa.
Un ataque preventivo y por sorpresa
Israel temía un ataque inminente del Ejército egipcio. En ese contexto llegó la operación Foco o Moked, que dio comienzo a la guerra de los Seis Días. Fue el 5 de junio de 1967.
Mientras la Fuerza de Emergencia de la ONU estaba en el proceso de abandonar la zona, el Ejército israelí lanzó una serie de ataques aéreos preventivos contra pistas de la fuerza aérea egipcia y otras de sus instalaciones. Fue una sorpresa absoluta.
Eran las 07:45 hora israelí, cuando se lanzó la operación con la primera oleada de ataques aéreos contra 11 aeródromos egipcios, destruyendo decenas de aviones estacionados en las pistas. La acción cogió desprevenidos a los egipcios y las defensas aéreas se vieron limitadas.
Oleadas de ataques aéreos israelíes, fundamentalmente con cazas Mirage III, destruyeron unos 311 aviones egipcios. Israel bombardeó bases sirias, iraquíes y jordanas. Decenas de pilotos egipcios murieron en los ataques, pero sólo cinco pilotos israelíes perdieron la vida (otros cinco fueron hechos prisioneros).
- Primera oleada (7:45 am):
- 101 vuelos
- 11 aeropuertos atacados por 183 aviones de Israel
- 197 aviones egipcios y ocho estaciones de radar destruidos - Segunda oleada (9:30 am):
- 164 vuelos
- 16 aeropuertos atacados
- 107 aviones egipcios destruidos
- 2 aviones sirios destruidos - Tercera oleada (12:15 pm):
- 85 vuelos contra Egipto
- 48 contra Jordania
- 67 contra Siria
- 1 contra Irak
Israel perdió sólo 19 aviones, aproximadamente el 10% de sus efectivos, en su mayoría debido a fallos mecánicos o accidentes. En cambio, casi todos los recursos militares aéreos de Egipto fueron destruidos, dando a Israel una evidente y fundamental superioridad aérea.