Steve Stich, gerente del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, afirmó en una conferencia de prensa posterior al aterrizaje de Boeing que los astronautas podrían haber vuelto a la Tierra el pasado 7 de septiembre.
Starliner partió de la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés) en un momento crítico en el que la NASA pidió a Boeing que la nave realizase un arranque rápido para alejarse de dicha estación orbital lo más pronto posible.
El pasado 7 de septiembre, dicha nave hizo una maniobra denominada 'breakout bur', que consiste en encender los motores rápidamente para alejarse de la Estación Espacial Internacional. Además, supervisada por los controladores de vuelo de la NASA en Houston y de Boeing en Florida, Starliner empezó su desorbitación cinco horas después de desacoplarse de la ISS. En ese momento, la cápsula estuvo a 120 kilómetros de la superficie de la Tierra y, al ser la parte más caliente del reingreso, su escudo térmico tuvo que soportar temperaturas de hasta 1.600 grados Celsius al entrar en la atmósfera.
Tras completar con éxito la entrada sobre el océano Pacífico, Starliner comenzó a disminuir su velocidad orbital, bajando a unos 28.000 kilómetros por hora. Y, finalmente, su escudo térmico se separó para permitir que sus seis airbags se inflaran y se desplegaran sus tres paracaídas para aterrizar a las 6:01 hora peninsular española del mismo 7 de septiembre en el puerto espacial White Sands (Estados Unidos).
Pese a que Starliner tuvo que regresar a la Tierra por petición de la NASA, la agencia espacial estadounidense quiere seguir trabajando en el proceso de certificación de la nave de Boeing, así pues, de cara a un futuro, servirá para las misiones de rotación de tripulación a la Estación Espacial Internacional.
La NASA apuesta por el proceso de certificación de Starliner
Boeing quiere convertirse en una alternativa privada a las naves de SpaceX para el Programa de Tripulación Comercial de la NASA y, aunque fue necesario trasladar Starliner a la Tierra, tanto la agencia espacial estadounidense como Boeing aprendieron mucho sobre los fallos provocados por el sistema de propulsión y las fugas de helio.
Por lo tanto, para cumplir con el objetivo mencionado, se enviará a Starliner al Centro Espacial Kennedy de la NASA (Estados Unidos) para proceder a su inspección. ¿El motivo? El Programa de Tripulación Comercial de la agencia estadounidense requiere que dicha nave espacial realice un vuelo de prueba tripulado, de esta manera, se demostrará que el sistema está listo para llevar a cabo vuelos regulares hacia y desde el laboratorio orbital.
No obstante, pese a las ideas que tiene la NASA con Boeing, el camino a seguir para Starliner todavía no está claro. La nave espacial tenía previsto empezar con sus misiones de seis meses con tripulación a la ISS a partir de febrero del próximo año –pero eso ya se ha pospuesto hasta agosto de 2025, como muy pronto–.
Cuándo regresan los astronautas 'atrapados' en el espacio
Los astronautas 'atrapados' volverán a casa en una nave Dragon de SpaceX con otros dos miembros de la tripulación Crew-9. Se espera que esta misión de SpaceX salga el próximo 24 de septiembre desde el Centro Espacial Kennedy y, si todo va según lo previsto, Butch Wilmore y Suni Williams regresarán en febrero del año que viene.
No obstante, Steve Stich, gerente del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, afirmó en una conferencia de prensa posterior al aterrizaje de la nave de Boeing que, si hubieran tenido a Wilmore y Williams a bordo de Starliner, habrían seguido "la misma secuencia de retroceso desde la estación espacial, el mismo encendido de salida de órbita y ejecutado la misma entrada. Y por lo tanto habría sido un aterrizaje seguro y exitoso con la tripulación a bordo".
{getToc} $title={Tabla de Contenidos}