Por suerte, ninguna de las tres mascotas de la casa resultó herida en el incendio.
Aunque el perro pueda ser el mejor amigo del hombre, es importante tener cuidado con los objetos que puedan estar a su alcance, ya que se pueden dar accidentes inesperados. Prueba de ello se ha vivido en una casa de Oklahoma, EEUU, donde se produjo un grave percance protagonizado por un can y una batería de litio.
Todo ocurrió en la ciudad de Tulsa, donde el departamento de Bomberos ha hecho público el vídeo de una cámara de vigilancia que grabó el suceso. Como se puede ver, el perro se encontraba jugando con una batería portátil sin saber lo que estaba a punto de ocurrir. Y es que en uno de sus mordiscos perforó el aparato provocando chispas.
Estas descargas, al entrar en contacto con el cojín donde estaba situado, derivaron en una gran llamarada que rápidamente se apoderó de la estancia. Por suerte, el perro protagonista, otro can y un gato que también estaban en la habitación, pudieron salir a tiempo escapando por la trampilla para animales instalada en la puerta de la casa.
Desafortunadamente, la casa sí sufrió daños, ya que en su interior se propagó un gran incendio. Debido a este accidente, el cuerpo de bomberos ha lanzado un mensaje advirtiendo sobre el peligro de dejar baterías al alcance de niños y mascotas. "Cuando esta energía se libera de forma incontrolada, puede generar calor, producir gases inflamables y tóxicos e incluso provocar explosiones", ha explicado Andy Little, uno de los profesionales.
"Es crucial que sigas las directrices del fabricante cuando utilices baterías de litio, usando solo cargadores homologados y guardándolas fuera del alcance de niños y mascotas", ha advertido el bombero, con la esperanza de que este contratiempo sirva de advertencia a otras personas.
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