El ministro de Transportes ha dicho que "el Gobierno está dispuesto a una revisión global".
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha defendido este viernes que el Gobierno que dirige Pedro Sánchez está dispuesto a revisar la financiación autonómica, "pero para todas las comunidades, no para una en concreto".
Así lo ha manifestado, en declaraciones a los medios en Lugo, tras ser preguntado por las declaraciones de la secretaria general de ERC, Marta Rovira, quien ha instado al Gobierno a poner "sobre la mesa" sus propuestas respecto a la nueva financiación de Cataluña y ha especificado que reclaman un cupo como el que tienen el País Vasco y Navarra, no "un tratamiento especial" como propuso el jueves la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Las palabras de Rovira han recrudecido la polémica que ya habían generado las palabras de Montero, quien defendió que las "cuestiones singulares" que tienen algunas comunidades como Cataluña "tienen que tener un tratamiento especial" en materia de financiación, pero recalcó que se llevará a cabo una negociación junto al resto de autonomías para impulsar un modelo que sea válido para todas.
Gobiernos de comunidades lideradas por el PP, entre ellos el de la Xunta, han manifestado su rechazo a tratamientos "singulares", al tiempo que han insistido en una negociación multilateral.
Con esta polémica en el foco, Puente ha proclamado en Lugo que "la posición del Gobierno en este momento es muy clara: nosotros estamos dispuestos a revisar la financiación autonómica, pero para todas las comunidades autónomas, no para una en concreto".
"Hay una cuestión sobre la mesa desde hace mucho tiempo, la financiación autonómica, la financiación local también, y el Gobierno está dispuesto a una revisión global", ha concluido.
Voces críticas
Numerosas voces se han alzado en esta polémica. Este viernes se han manifestado e contra en contra barones del PP como los presidentes de Andalucía, Juanma Moreno, o Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y al presidente castellanomanchego, el socialista Emiliano García-Page.
García-Page dijo que le parece una "ofensa" para las demás regiones, un "privilegio" y no una "singularidad", algo que va contra de los valores progresistas y "un precio demasiado caro por mantener un puesto", de modo que no piensa consentirlo.
Por su parte, el PSOE de Extremadura ha advertido al Gobierno de España de que no va a permitir "chantajes" por parte de ninguna comunidad respecto al nuevo modelo de financiación autonómica.
Entre los presidentes del PP, el andaluz Juanma Moreno ha mostrado este viernes su rechazo a lo que considera un "nuevo ataque" a la solidaridad interterritorial y a la igualdad de los españoles y la "enésima" cesión al independentismo catalán.
La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, dijo por su parte que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, quiere así "comprar voluntades y elecciones" en Cataluña y se sitúa ya en un camino "a la ultraizquierda" y hacia "la descomposición", en el que "no tienen ningún límite".
El presidente aragonés Jorge Azcón ha asegurado que si la ley del amnistía rompe el principio de igualdad entre los españoles, una financiación singular para Cataluña rompe el de la solidaridad entre los territorios, y ha criticado que "las necesidades de Cataluña estén en función de las urgencias políticas del presidente del Gobierno y de la necesidad de unos votos".
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