Planes para el fin de semana en Madrid: danza, música electrónica...


         Planes para el fin de semana en Madrid: danza, música electrónica...

Un gran ballet clásico; la vida atrapada en fotografías; flamenco; una astracanada teatral sobre la sociedad; música electrónica para todas las edades; las entrañas de la Tierra en el Planetario

Ballet. 'La Bayadère' en el Teatro Real

El Teatro Real presenta estos días una de los ballets más relevantes y encantadores del repertorio clásico: La Bayadère. Para poner en escena esta joya coreográfica se requiere una compañía dotada técnicamente para afrontar los retos que plantea, y para ello ha desembarcado en la capital el Bayerisches Staatsballet -Ballet Estatal de Baviera-, con sede en Múnich, una de las agrupaciones más prestigiosas de este Viejo Continente, al que ya el término viejo empieza a quedar corto.

La Bayadère es una perfecta combinación del ballet clásico más excelso, con aportes aromáticos del Oriente, inspirados en la danza tradicional hindú. De hecho, el conjunto bávaro ha contado con el asesoramiento de Anoosha Shastry, bailarina clásica de la India, que ha transmitido la esencia de los ricos movimientos y la estética que allí son comunes.

Estrenado en 1877 en el Teatro Imperial Bolshói, de la mano del coreógrafo Marius Petipa, La Bayadère está ambientado en un imaginario reino del Indostán habitado por dos esferas que confluyen y disputan entre ellas: el ámbito religioso del templo, con su sacerdotes y bailarinas, dirigido por el Gran Brahmán; y el círculo cortesano del Rajá, equivalente a un rey. Dos representantes femeninas de cada esfera de poder, Nikiya y Gamzatti, se disputan el amor de un noble guerrero llamado Solor. El conflicto está servido y no hay piedad entre ellas… o sí, pero para eso habrá que contemplar el desenlace.

Laurent Hilaire es director del ballet bávaro, estuvo presente en la rueda de prensa en el Teatro Real y posee un conocimiento extraordinario de esta obra de Petipa. No en vano, Rudolf Nureyev le eligió como bailarín principal de la última producción de La Bayadère que se ofreció en la Ópera de París, meses antes de su fallecimiento en 1993. Hay un registro imprescindible, en vídeo, que inmortalizó aquel momento mágico en la historia del ballet. Hilaire reconoce la influencia del gran bailarín ruso en la propuesta que ahora llega a través de la coreografía de Patrice Bart, pero además ha aportado una dimensión muy humana en la resolución de la historia, que no pudo llevarse a cabo en París. Además, afirma que la propuesta de Bart es todavía más compleja, coreográficamente, lo cual es decir mucho.

Tras ese momento subyugante del segundo acto, ambientado en el Reino de las Sombras, en el que 24 bailarinas surgen poco a poco del fondo de escenario, se ha incorporado una resolución que aporta una novedosa visión. Estamos deseando cononcerla.

Se ofrecen cinco funciones de jueves a domingo, con tres repartos diferentes, y en una de ellos debutará en el rol de Gamzatti la joven bailarina Bianca Teixeira. Para la representación del sábado a las 21:30 horas quedan todavía muy buenas localidades. Los que no estén pendientes de la decimoquinta Copa de Europa del Real (Madrid), que intentará conseguir el equipo blanco a la misma hora en Wembley, tienen una cita ineludible en el (Teatro) Real.

  • Del jueves 30 al domingo 2 (diferentes horarios) | Teatro Real | desde 18 euros

Fotografía. 'Una incierta luz' de Gonzalo Juanes

La Sala Canal de Isabel II dedica una exposición a Gonzalo Juanes, bajo el título de Una incierta luz. El fotógrafo asturiano fue un pionero en el uso del color en sus instantáneas documentales, empleando la diapositiva como soporte habitual, siempre con una visión muy humana. Su obra ha permanecido oculta y poco reconocida, como demuestra el hecho de que hasta 2003 no se organizó una exposición individual de su obra, en Gijón. Es de justicia, por tanto, ofrecerle visibilidad aprovechando el certamen de PHotoESPAÑA.

Chema Conesa es el comisario de esta muestra, y en el texto con que abre el catálogo editado destaca la importancia del concepto de instantánea, de ese primer fonema de un nuevo lenguaje fotográfico, la detención del movimiento que atrapa un fugaz momento. Es precisamente lo que trabajó Gonzalo Juanes desde un punto de vista lúdico, ref... {getToc} $title={Tabla de Contenidos}

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