El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no ha negado la existencia de una instrucción de su departamento que otorga a la Ertzaintza y a los Mossos d’Esquadra las competencias de seguridad en fronteras de puertos y aeropuertos. Esa función en la zona restringida de estas instalaciones corresponde en la actualidad a la Guardia Civil, cuya presencia pasaría a ser testimonial, como ha desvelado El Confidencial. El ministro ha garantizado que, en caso de que finalmente se lleven a cabo cambios, se harán dentro de la legalidad.
Aunque la instrucción permanece oculta desde hace semanas, algunos responsables políticos y policiales ya han tenido acceso a su contenido. Según las fuentes consultadas por este periódico, la intención inicial de Interior era haber anunciado los cambios en marzo, durante la celebración de las juntas de Seguridad previstas para el pasado 22 de marzo con Euskadi y el 25 de marzo en Cataluña, foro en el que Interior y las consejerías de Seguridad autonómica abordan cuestiones policiales de manera bilateral.
Sin embargo, el calendario electoral y la convocatoria de las elecciones vascas y catalanas sacudió el tablero político y alteró los planes. El ministerio anuló las dos juntas de seguridad pocos días antes de su celebración. El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, criticó los “intereses partidistas” del PSC, que forzaron la suspensión de la Junta de Seguridad de Cataluña. Según explicó, esta junta tenía que servir para firmar nuevas competencias relevantes para los Mossos d'Esquadra, para que pase a ser la policía competente de los aeropuertos y puertos de Cataluña, según recogió Europa Press.
“En relación a cualquier medida que se pueda adoptar en términos de seguridad pública, ese marco competencial está establecido tanto en la Constitución como en la Ley Orgánica 2/1986 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y en los correspondientes estatutos de autonomía. Toda medida que hipotéticamente pudiera adoptarse es en el marco estricto del marco constitucional y del resto de ordenamiento jurídico”, ha dicho el ministro este lunes en una declaración ante los medios de comunicación antes participar en una reunión en la Dirección General de Tráfico (DGT).
Preguntado específicamente si desmiente la existencia de la instrucción que reconoce las competencias de Seguridad a las policías autonómicas en la zona hasta ahora reconocida a la Guardia Civil, el ministro no ha negado la existencia del documento. En lugar de explicar su contenido, ha destacado un punto que también avanzaba El Confidencial. Ha insistido en que dentro de estos cambios no está en cuestión la competencia exclusiva de Policía Nacional en materia de Extranjería ni de la Guardia Civil en materia fiscal en las fronteras.
Lo que recoge el plan cocinado en secreto por Interior es ceder a los gobiernos vasco y catalán el control de la seguridad en las fronteras de puertos y aeropuertos en un sentido amplio: prevención de la delincuencia, vigilancia, investigación de delitos, intervención en incidentes de orden público, actuación ante accidentes de tráfico, etc. Los puertos y aeropuertos tienen el carácter de frontera exterior Schengen (acceso al territorio europeo), por lo que supone entregar a los gobiernos vasco y catalán el control de la seguridad en las fronteras aéreas y marítimas.
“Todo lo que es control de fronteras es una competencia exclusiva del Estado y, por tanto, corresponde a la Guardia Civil y a Policía Nacional, por lo tanto, no puede haber ningún traslado de competencia en esa materia tan importante como es el control de las fronteras tanto marítimas, terrestres como aéreas, es un tema de cobertura constitucional”, ha dicho Grande-Marlaska, al tiempo que ha negado cualquier tipo de presión de los independentistas para acometer estos cambios.
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