La actriz dejó su profesión a principios de los 2000, y desde su último divorcio se mantiene alejada de los medios.
Carey Lowell se convirtió en una reconocida personalidad en los años 80 por sus papeles como actriz, además de que el público tuvo la oportunidad de conocerla también por su carrera en la moda.
Cabe recordar que Lowell destacó sobre todo por haber sido chica Bond en Licencia para matar, pero también formó parte del elenco de la serie Ley y orden.
Pero Lowell es también una personalidad reconocida por casarse con el actor Richard Gere en 2002. Después de dos matrimonios, con el fotógrafo de moda John Stember y el actor Griffin Dunne, la actriz inició una vida con el protagonista de Pretty Woman, con quien tuvo a su hijo Homer James Jigme Gere.
No obstante, y al margen de su vida personal, Carey Lowell cambió totalmente de profesión. De hecho, dejó la actuación en la primera década de los 2000, y desde que se separó de Gere en 2014, se mantiene alejada del foco mediático.
La cerámica, el nuevo ámbito de Lowell
Actualmente, su vida se centra en la cerámica, "un mundo que conoció estudiando secundaria", tal y como recoge la revista Hola. La ya exactriz habría perfeccionado su técnica en esta actividad artesanal en la escuela Greenwich House Pottery, y desde la pandemia causada por la COVID-19 se dedica plenamente a la cerámica.
Lowell trabaja en California y en Nueva York, y en ambos lugares tiene un estudio donde elabora piezas como jarrones, cuentos y platos con motvios de naturaleza. Según explica la revista, Lowell recibe muchos pedidos.
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