Este actor crea cuadros en restos de obras, los deja en la calle y tú te los puedes llevar a casa

Este actor crea cuadros en restos de obras, los deja en la calle y tú te los puedes llevar a casa

Hay un joven en Madrid que pinta en restos de basura unas obras que te puedes llevar gratis a tu casa. Las tablas que sobran de las obras que pueblan la capital y que se dirigen al vertedero son su lienzo: se pinta a sí mismo desde que vio reflejada su sombra en una de ellas. Claudio Portalo deja atrás cada día su casa cargado de rotuladores y no necesita más que un paseo para encontrar su lienzo ideal. Nunca sabe dónde surgirá la oportunidad. Su personaje, su alter ego, se llama Cl4u8io. Aunque el proyecto comenzó como algo alejado de lo económico, el artista decidió vender algunas de sus creaciones para sufragar costes: en unos meses ha duplicado su valor.

Él es actor profesional, ha participado en producciones audiovisuales como El Ministerio del Tiempo, La Caza. Guadiana y Servir y proteger, y esta particular bombilla artística se le encendió en mayo de 2023. “Era un momento económicamente nefasto para mí y no tenía dinero para comprar lienzos y así continuar con mi proyecto”, relata el protagonista de esta historia. En aquel momento, ante la carencia de espacio para dibujar, Portalo quería pintarlo todo. “Era una sensación muy latente. Un día volvía a mi casa de Malasaña y a la entrada del barrio vi muchas maderas tiradas en el suelo”, continúa.

Rápidamente, este actor desenfundó sus markers y comenzó a crear. "Me dije que ese era el momento, que podía pintar en esas maderas, pero de pronto me asoló un vacío de dudas inmenso porque no sabía qué idea quería transmitir", relata el creador de Cl4u8io. En ese momento, el farolillo de un bar que yacía justo a su espalda iluminó su busto frente a la tabla. “La pregunta se contestó por sí sola, haría un autorretrato solo remarcando el contorno de esa sombra”, añade.

Dejar en la calle lo que nació en la calle

La primera obra se quedó en la calle únicamente acompañada por un texto escrito en otra tabla que Claudio colocó al lado. "Yo tan solo soy un inquilino en este mundo de plástico, un chatarrero limpiando el espacio", escribió parafraseando a Silvia Pérez Cruz. "Lo dejé en la calle porque lo encontré en la calle. Responde más a un impulso o necesidad de pintar que de generar una obra siquiera o algo material", explica ahora el actor.

Claudio mientras pinta sus cuadros para después dejarlos en la calle (G.M)Claudio mientras pinta sus cuadros para después dejarlos en la calle (G.M) Claudio mientras pinta sus cuadros para después dejarlos en la calle (G.M)

Poco a poco, Portalo se dio cuenta de la inmensa cantidad de madera que se desecha en su barrio. "Me preguntaba por qué tantas tablas, por qué tantos sacos de rafia y residuos de la industria de la construcción. Ahí me di cuenta de que eran consecuencia de la especulación y la transformación del barrio", se responde a sí mismo.

El secretismo es parte de su esencia y por ello nunca anuncia cuál será el siguiente enclave en el que dejará sus pinturas, cada vez más codiciadas. "Los hago en los llamados espacios liminares, de transición. Normalmente, no salgo a la calle en busca de pintar, solo llevo mis rotus y cuando encuentro el soporte me limito a crear, lo documento y lo deposito en la vía pública", precisa el artista. La acción consiste en encontrar en la calle, pintar en la calle y dejar en la calle. Solo hacen falta unos minutos- incluso a veces unos segundos- para que la obra encuentre a su dueño.

300 obras a las que dedica entre cinco y diez minutos

Portalo no tiene un censo exhaustivo de sus obras, pero calcula que ha realizado unas 300 intervenciones de este tipo no solo en Madrid, sino también en Sevilla, País Vasco, Extremadura, Cataluña, e incluso, Francia. Para cada una de estas creaciones el actor dedica entre cinco y diez minutos, aunque depende del tamaño del lienzo. Ha llegado a pintar en tableros de dos metros de altura y en otros de apenas 60 centímetros. “Pinto siempre lo mismo, pero juego con los tonos a través de los colores primarios. Es un autorretrato que con el tiempo se ha ido definiendo”, añade.

Personas llevándose las creaciones de Claudio Portalo (G.M)Personas llevándose las creaciones de Claudio Portalo (G.M) Personas llevándose las creaciones de Claudio Portalo (G.M)

Los dos movimientos artísticos de los que bebe Cl4u8dio son el postvandalismo y el neopop. El actor creció con la cultura hip-hop, que empezó a seguir cuando no tenía ni 10 años, por lo que la pintura callejera no es nueva para él. La intervención se desarrolla en espacios urbanos con acciones disruptivas e incorpora elementos de la restauración, es decir, dialoga con el entorno, de ahí el postvandalismo. En neopop procede de la conservación de aspectos del arte pop, pero con ideas contemporáneas, poniendo el énfasis en la cultura popular dominante, individual, consumista, producida en serie.

Un proyecto “democrático”

La gente ya le conoce. Cl4u8io se ha expandido de forma orgánica, sin intermediarios más allá de las redes sociales- @cl4u8io en Instagram- ni estrategias calculadas, sino a través de la interacción directa con el público. “Su esencia es muy primitiva al tratarse de una acción tan sencilla como encontrar, intervenir y depositar”, reitera el artífice. No son pocas las personas que le piden a Portalo conocer la ubicación del próximo lugar en el que sacará sus rotuladores a pasear. Pero lo mantiene en secreto, porque es lo "efímero y casual" lo que aporta significado al proyecto, que el propio Portalo describe como “democrático”.

Alberto G. Luna

Claudio nunca imaginó esta idea artística para ser vendida. El hecho de que personas de diferentes partes del mundo le dijeran que querían uno de sus Cl4u8ios le hizo repensar la cuestión. “Era reacio, pero al final vi que cada vez yo invertía más tiempo y dinero en ello, así que pensé que era interesante poder remunerar estas acciones para al menos cubrir los costes”, cuenta Portalo cuando vuelve de Correos de enviar obras hasta Manchester, Canarias y Cataluña.

Él mismo tasó sus obras en 75 euros. Casi dos años después del inicio de la andadura artística, las vende por 150 euros. “Tampoco me creía con el derecho de vender un residuo que yo me había encontrado por la calle, así que empecé con láminas de papel de alta calidad, y ahora envío la tabla completa”, aclara. De todas formas, este joven extremeño mantiene que su gran afán es continuar con el proyecto "tan democrático como siempre". Es decir, quien se lo encuentra en la calle y le gusta, se lo queda. En estos momentos, el también actor intenta entrar en la industria del arte y acercar sus creaciones a galerías y coleccionistas. Habrá que esperar todavía un tiempo para ver si sus sueños se hacen realidad.



{getToc} $title={Tabla de Contenidos}

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente

Formulario de contacto