Este producto para retirar el maquillaje y la suciedad de la cara y los ojos me ha durado casi un año y es ideal para mi dermatitis atópica.
No recuerdo exactamente a qué edad comencé a maquillarme, lo que sí tengo grabado a la perfección en mi memoria fue el momento en el que descubrí la importancia de desmaquillarme. Me remonto a la época en la que comencé a trabajar como periodista de belleza, un mundo en el que descubrí, por un lado, que es esencial mantener un 'skin care' tanto de día como de noche; así como una buena limpieza de productos de 'makeup' para eliminar las células muertas e impurezas que se acumulan en la piel de la cara, la cual está expuesta constantemente a la contaminación durante todo el día, a pesar de no salir de casa.
Y con esta práctica de retirar el maquillaje no solo me refiero a la piel, sino también a los ojos, ya que es igual de importante no irnos a dormir con ellos llenos de máscara de pestañas, por ejemplo. Es una zona en la que se acumulan bacterias debido a que actúan como barreras de defensa y es de vital importancia retirar toda la suciedad y productos antes de pasar toda la noche con los ojos cerrados.
El desmasmaquillante para ojos y rostro de Clinique que ha conquistado mi piel atópica
A lo largo de estos años debido a mi profesión, he probado gran cantidad de productos desmaquillantes que me han parecido magníficos. Sin embargo, hay uno en concreto que ha conquistado mi corazón (y el de todas mis amigas, porque no paro de recomendarlo). Se trata del bálsamo para ojos y rostro 'Take The Day Off' de Clinique, cuya textura sedosa es de lo más agradecida para mi rostro.
Padezco de dermatitis atópica desde que nací y no cualquier producto es apto para mi piel, pero este bálsamo, además de retirar todo rastro de maquillaje y suciedad de una de sola pasada, no deja sensación grasa ni reseca la dermis, sino que, más bien, la deja suave y bastante hidratada.
Además, su método de uso es bastante sencillo: tan solo tenemos que coger un poco de producto con los dedos y aplicárnoslo por toda la cara en movimientos circulares realizando un ligero masaje para notar cómo va retirando todos los productos. Después, lo retiramos con un poco de agua tibia y secamos con una toalla. Por último, en mi caso, aplico alguna de mis cremas hidratantes nocturnas de confianza y... ¡listo!
Otra de las ventajas que he podido notar sobre este bálsamo desmaquillante de Clinique es que dura mucho, ya que no es necesario aplicar demasiado producto para ver buenos resultados. De hecho, yo ya voy camino del año con el formato de 125 mililitros (disponible en Primor por 20,41 euros), y eso que lo uso diariamente. Por lo que puedo decir que es un cosmético realmente rentable en cuanto a calidad y precio.
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