Sánchez aboga por reformar la Constitución para "blindar" derechos ante el "avance reaccionario"Armengol apela al éxito del consenso constitucional a pesar de este "tiempo atronador"
Este 6 de diciembre se cumplen ya 46 años desde que la Constitución Española de 1978 fue ratificada en referéndum. Fue uno de los grandes pilares de la Transición, que sentó las bases del sistema democrático que hemos construido en España desde el final de la dictadura.
Durante todo este tiempo ha sido el marco legal de nuestro país, y solo ha tenido tres reformas, todas ellas mediante procedimiento ordinario parlamentario: la que permitió que los extranjeros comunitarios puedan presentarse a elecciones municipales (1992), la polémica reforma del artículo 135 que otorgó "prioridad absoluta" al pago de la deuda pública en los presupuestos (2011), y el reemplazo este mismo año del término "disminuidos" por "personas con discapacidad".
La presidenta del Congreso, en el #DíaDeLaConstitución: "Es nuestro mejor ejemplo de éxito colectivo".📝Nota de prensa: https://t.co/kpB4qz8HbD📸 Fotonoticia: https://t.co/4LDg69Ncbd pic.twitter.com/2ZZgFqnTtj
— Congreso (@Congreso_Es) December 6, 2024
Si la Constitución de 1978 continúa en vigor a finales del próximo año 2025, se convertirá en el texto constitucional que más tiempo ha estado vigente en la historia de España, superando los 47 años de la Constitución de 1876.
Historia de las constituciones en España
Pero, aunque ya llevamos casi 50 años con esta Constitución, la historia del constitucionalismo español va mucho más allá. A lo largo de la historia de nuestro país, ha habido otras muy importantes en vigor. Cada una de ellas fue el reflejo del correspondiente contexto social de su época, y de los cambios que se estaban viviendo.
Constitución de Cádiz ("La Pepa") (1812):Promulgada el 19 de marzo de 1812 durante la Guerra de Independencia contra Francia, fue la primera constitución española y un referente del liberalismo europeo. Estableció principios fundamentales como la soberanía nacional, la división de poderes, el sufragio indirecto masculino, y derechos fundamentales como la libertad de imprenta. Supuso un hito en la historia constitucional, aunque tuvo una aplicación limitada debido al regreso del absolutismo con Fernando VII, quien la derogó en 1814, aunque volvió a estar vigente entre 1820 y 1823 (el Trienio Liberal).
Estatuto Real (1834):Aunque técnicamente no era una constitución, fue una carta otorgada durante la regencia de María Cristina de Borbón. Introdujo un sistema bicameral con un Estamento de Próceres (aristocracia) y un Estamento de Procuradores (burguesía), marcando un nuevo paso hacia el constitucionalismo. Su carácter moderado reflejaba el intento de equilibrar las tensiones entre absolutistas y liberales.Constitución de 1837: Aprobada tras la victoria liberal en la Primera Guerra Carlista, consolidó el modelo de soberanía nacional y un sistema parlamentario bicameral. Aunque de carácter progresista, buscó un consenso entre moderados y progresistas para estabilizar el país. Fue clave para limitar el poder real y abrir camino a reformas importantes.Constitución de 1845: Impulsada durante el reinado de Isabel II, representó un giro hacia posiciones conservadoras. Centralizó el poder administrativo, restringió el sufragio y otorgó amplias competencias a la monarquía, reduciendo la capacidad legislativa de las Cortes. Fue un reflejo del dominio moderado en esta etapa de la historia.Proyecto de Constitución (Non Nata) (1856): Propuesta durante el Bienio Progresista, buscaba ampliar derechos individuales y establecer un sistema democrático avanzado. Aunque nunca entró en vigor debido al retorno del poder moderado, destacó por su intención de profundizar en libertades como la libertad de asociación y expresión.
La historia del rey Amadeo de Saboya: el gran olvidado que se dio a la fuga
Álvaro Van den Brule
Aprobada tras la Revolución Gloriosa, fue la más democrática de su tiempo. Estableció la soberanía nacional, el sufragio universal masculino y derechos fundamentales como la libertad de culto. Fue el marco legal de la breve monarquía de Amadeo I, y también estuvo parcialmente en vigor durante la Primera República.Constitución de 1876: Adoptada tras la Restauración borbónica con Alfonso XII, fue una constitución flexible que permitió la alternancia en el poder entre conservadores y liberales mediante el sistema de turno pacífico. Reconoció derechos individuales, aunque con limitaciones, y mantuvo un sistema parlamentario bajo una monarquía constitucional. Es hasta la fecha la que más tiempo ha estado en vigor, durante 47 años: fue finalmente suspendida en 1923, tras el golpe de Estado de Miguel Primo de Rivera con el beneplácito del rey Alfonso XIII.Constitución de 1931: Promulgada tras la proclamación de la Segunda República, marcó un cambio radical hacia un sistema democrático, progresista y laico. Incluía derechos sociales avanzados, la separación de Iglesia y Estado, el sufragio universal femenino (por primera vez en España), y reconocía la autonomía de las regiones. Sin embargo, y pese a sus avances, la falta de consenso social en su aprobación y la profunda división ideológica de la época contribuyeron a la polarización en España, lo que debilitó su capacidad para consolidar un sistema democrático estable. Fue derogada tras la Guerra Civil y el inicio del franquismo.
Qué pasó el 14 de abril en España y cómo se proclamó la Segunda República
Roberto Ruiz Anderson
Primer marco legal del franquismo, aunque no era una constitución. Fuertemente inspirado en el corporativismo del fascismo italiano, estableció principios laborales y sociales controlados por el Estado, eliminando derechos democráticos y subordinando a los ciudadanos al régimen.Fuero de los Españoles (1945): Tampoco fue una constitución, sino que representaba parte de las leyes fundamentales del franquismo. Recogía derechos y deberes de los ciudadanos, aunque de manera limitada y bajo el control del Estado. Fue una forma de dar apariencia de legalidad al régimen dictatorial.Constitución Española de 1978: Redactada tras la Transición, consolidó España como un Estado social y democrático de derecho. Estableció la monarquía parlamentaria, amplios derechos y libertades, y un sistema de comunidades autónomas. Es la constitución vigente y uno de los principales pilares de la democracia en España.
{getToc} $title={Tabla de Contenidos}