El hombre murciélago de Gotham no está por ningún lado en la serie protagonizada por Colin Farrell.
Al plantear la serie de El Pingüino, la showrunner Lauren LeFranc ya sabía que no iban a poder contar con Batman. Iban a contar una historia ambientada en la Gotham planteada por la película de Matt Reeves protagonizada por Robert Pattinson, donde había aparecido por primera vez el Oswald Cobb de Colin Farrell, pero sin hombre murciélago de por medio. Y no pasaba nada.
"Entiendo por qué la gente deseaba tener a Batman, o pensaba que si Batman no sale en una serie o una película no tienen el mismo impacto", contó en una entrevista para la revista SFX (vía Total Film) antes del estreno. "Yo creo que es diferente. Las películas de Matt [Reeves] están vistas a través de Batman, asomándose a la ciudad desde las alturas. Con Oz [el Pingüino] estamos a nivel de calle, con toda la mugre, el fango y la suciedad. Él mira hacia arriba, anhelando escalar hasta la cima".
'El Pingüino': las alianzas del episodio 6
El sexto episodio de El Pingüino ha apuntalado a la perfección esa perspectiva. En él, asistimos a una fase más del plan de Oz para derrocar a las grandes familias mafiosas de Gotham y hacerse con el control del crimen organizado de la ciudad. Tras haber traicionado a sus antiguos empleadores, los Falcone, aliándose con sus enemigos los Maroni y habiéndolos traicionado igualmente, Oz se ha volcado en el cultivo y tráfico de Bliss.
Esta nueva droga alucinógena con la que pretende inundar Gotham le hace ganar mucho dinero pero también tiene que hacer frente a algún que otro asesinato de sus vendedores a manos de una Sofia (ahora, Sofia Gigante; siempre, la magnética Cristin Milioti) bastante rebotada con la enésima traición de su antiguo chófer. Para mitigar ese contratiempo, Oz decide distribuir libremente cajas de Bliss por la ciudad con el fin de llamar la atención de otras bandas criminales de Gotham.
Así es como acaba organización una reunión de gangsters de Gotham con representantes de bandas procedentes de los cómics de Batman, como las triadas con las que tanto quiere negociar, pero también los Sullivan, los Lo-Boys o los Burnley Town Massive (o BTM) liderados por Able Crown. Parece una reunión de malos donde Batman podría ponerse las botas haciendo detenciones, ¿verdad? Lástima que se lo haya perdido.
El caso es que no deberíamos tenérselo muy en cuenta. Tal y como ha explicado Lauren LeFranc, todos estos asuntos delictivos están sucediendo muy por debajo del radar del murciélago. La guerra de familias criminales, mientras consista en liquidarse entre sí, está lejos del foco de interés del caballero oscuro, quizás más preocupado por amenazas mayores como posibles terroristas que quieran seguir los pasos del Acertijo (Paul Dano).
Si por el camino cae algún que otro criminal, o familias enteras como los Falcone, bienvenido sea. Si Oz acaba haciendo realidad sus sueños de grandeza, al hombre murciélago no le quedará más remedio que enfrentarse una vez más contra el Pingüino.
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