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Los productos que subirán su IVA a partir de octubre de 2024 en los supermercados de EspañaQuiero vender mi vivienda habitual con 64 años, ¿tendré que pagar a Hacienda?
El coste de vida en las principales ciudades de España no deja de aumentar, y uno de los factores que más pesa en el bolsillo de los ciudadanos son los impuestos locales. Madrid y Barcelona lideran el ranking de las capitales de provincia donde más se paga, con cifras que superan los 1.000 euros por habitante.
Sin embargo, sorprendentemente, no son Sevilla ni Bilbao las que ocupan la tercera posición, sino una ciudad que está logrando destacar por su presión fiscal. Según el reciente estudio del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), Tarragona se posiciona como la tercera ciudad con mayor recaudación de impuestos locales, alcanzando los 917 euros por habitante.
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Carlos Sánchez
Esto la sitúa justo detrás de Barcelona, donde el desembolso es de 978 euros, y Madrid, que lidera el ranking tributario con 1.001 euros per cápita. Esta cifra refleja una diferencia significativa en comparación con otras capitales de provincia españolas.
Los impuestos que más afectan a los ciudadanos
El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) sigue siendo el tributo que más contribuye a la recaudación municipal, representando el 66% de los ingresos locales en todo el país. En Tarragona, este impuesto tiene un peso considerable y se ha convertido en uno de los principales factores que elevan el coste de vida para sus residentes. Mientras Girona encabeza la lista de ciudades con el IBI más alto, Tarragona no se queda muy atrás en la contribución de este impuesto.
Aparte del IBI, otros como el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) y el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) también inciden en la economía local, incrementando la presión fiscal para los habitantes de Tarragona y ubicándola en esta tercera posición.
Las tasas municipales juegan un papel esencial en la financiación de los ayuntamientos y, en el caso de Tarragona, tienen un impacto significativo en la recaudación. La disparidad en cómo se aplican estas tasas en distintos servicios y su variabilidad han suscitado críticas entre los contribuyentes. Desde el Consejo General de Economistas de España, se ha señalado la urgencia de una propuesta clara de financiación autonómica y local que garantice una mayor equidad y transparencia.
España es un infierno fiscal, aquí va un ejemplo.Autónomo con ingresos de 150.000€ y gastos de 10.000€.Impuestos + Cotizaciones pagados en:🇪🇸España: 60.094€🇬🇪Georgia: 1.500€Pero en España hay que subir las cotizaciones porque los autónomos no pagan lo suficiente
— Invertir es vivir (@invertiresvivir) April 27, 2022
Además, la ausencia de un órgano económico-administrativo en ciertos municipios dificulta que los ciudadanos puedan expresar sus discrepancias respecto a las liquidaciones tributarias. Este proceso, que en muchas ocasiones implica recurrir a la vía judicial, resulta costoso y poco accesible para quienes desean cuestionar las decisiones fiscales locales.
Mientras Tarragona se enfrenta a una de las cargas fiscales más elevadas del país, otras ciudades como Pamplona (435 euros) y Jaén (492 euros) se encuentran en el extremo opuesto, con cifras significativamente más bajas. Esta situación pone de manifiesto la diversidad en la presión fiscal que soportan los ciudadanos según su lugar de residencia y la necesidad de replantear cómo se gestionan los impuestos locales en el conjunto de España.
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