La tensión entre Gobierno y PP por la crisis de Venezuela ha escalado este jueves después de que el vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, haya acusado directamente al Ejecutivo de estar "implicado en el golpe de Estado" en Caracas, un señalamiento sin paños calientes que se produce después de que Edmundo González publicase en redes sociales un vídeo en el que denuncia las "coacciones" que sufrió en la embajada española de Venezuela por parte de dos altos cargos del régimen chavista para firmar un documento en el que reconocía la victoria de Nicolás Maduro y poder salir, con ello, del país.
Alberto Núñez Feijóo, por su parte, ha evitado referirse a las polémicas declaraciones del responsable internacional del PP. El líder popular ha comparecido ante los medios de comunicación en Roma tras una reunión institucional con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y con el responsable de Exteriores, Antonio Tajani, y ha exigido directamente la dimisión de José Manuel Albares por "ocultar" las "coacciones" a Edmundo González. "Que el ministro de Asuntos Exteriores esté relacionado con una coacción a un representante del pueblo venezolano es inadmisible", censuraba Feijóo.
"Bajo ningún concepto y sin ninguna excusa se puede permitir que en la embajada española se coaccione a nadie, menos aún de parte de quienes son protagonistas de un demoledor informe de Naciones Unidas por violación masiva de los derechos humanos", ilustraba, en alusión a la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez; y su hermano y presidente de la Asamblea venezolana, Jorge Rodríguez. La imagen, que se produjo en la residencia del embajador español en Caracas, pone en entredicho a juicio del PP las palabras de José Manuel Albares, que reiteró que no hubo negociación alguna con el régimen de Maduro para permitir la salida a Edmundo González.
Albares, que ha participado este jueves en una reunión con representantes de los Gobiernos del Reino Unido y de Gibraltar para discutir el estatus de la Roca después de la salida británica de la Unión Europea, ha señalado que “el Gobierno no ha participado en ningún tipo de negociación entre Edmundo González y el Gobierno de Venezuela”, que es el mensaje que el ministerio de Asuntos Exteriores lleva defendiendo desde que se conoció la existencia del documento. El Ejecutivo español “no ha participado en la redacción, concepción y elaboración de ningún tipo de documento que se haya podido establecer entre González y el Gobierno de Venezuela. El Gobierno de España no ha participado en ninguna negociación política, y nadie le ha solicitado al Gobierno ni nosotros hubiéramos aceptado ninguna contrapartida política para que él pueda estar hoy en España libre y solicitando el derecho de asilo”.
Feijóo ha reclamado también "reemplazar" al embajador de España en Venezuela tras el polémico episodio, además de exigir explicaciones "urgentes" a Sánchez de lo sucedido. Pero el líder popular ha evitado referirse en todo momento a las declaraciones de Esteban González Pons, pese a ser preguntado en hasta tres ocasiones por esta cuestión. Fuentes del PP aseguran que ni Feijóo ni Génova van a desautorizar al vicesecretario de Institucional por asegurar que el Gobierno de Sánchez está implicado con el "golpe" del régimen chavista. Pueden diferir en el tono, explican, pero no en el fondo de la cuestión.
El ministro de Asuntos Exteriores ha defendido al embajador. "El embajador de España tenía instrucciones precisas de no inmiscuirse en la libertad de Edmundo González para poder hablar, gestionar, tener encuentros con quien él consideraba. Nuestro objetivo era que la decisión que Edmundo González tomara fuera la que él realmente quisiera", ha señalado a las puertas de la Comisión Europea. "El embajador no tuvo nada que ver con esto. Absolutamente nada que ver", ha defendido.
Las declaraciones de Pons
Durante una entrevista en esRadio, Pons ha asegurado que "el Gobierno de España ha sido cooperador necesario, y el Gobierno de España ha estado implicado en el golpe de Estado que se ha producido en Venezuela", afirmó el eurodiputado y responsable internacional del PP durante una entrevista en esRadio. El vicesecretario popular afirmó además en la entrevista que Edmundo González estaba acogido en primera instancia en la embajada de Países Bajos, pero que después fue trasladado a la española porque "muy probablemente" en la primera se negaron a las "coacciones" del régimen de Maduro.
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EFE
El dirigente popular ha señalado también al expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al que señala como "gran urdidor" del plan para "convertir a Maduro en dictador por más tiempo". "Detrás de todo lo que está ocurriendo, hay que tener claro que está Zapatero, que sigue callado, sin decir nada y sin hacer ninguna declaración. Ha comprometido al Gobierno en esta operación", afirmaba.
Las afirmaciones de González Pons han provocado enorme malestar en Ferraz, desde donde exigen su dimisión "inmediata". "Las acusaciones que realiza son de tal gravedad que dudamos que sea consciente de lo que está diciendo. En todo caso, eso no es disculpa, y sus palabras de hoy son la gota que colma el vaso", apuntan fuentes del PSOE, que califican de "intolerables" sus declaraciones y le sitúan como un "hooligan cuyo único problema es la frustración de no haberse enterado de que Edmundo González estaba refugiado en la embajada de España, y sería acogido en nuestro país", explican.
Por su parte, fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores citadas por Europa Press han asegurado que "el Gobierno de España no tiene nada que ver con cualquier documento o negociación entre Edmundo González y el Gobierno de Venezuela", y han explicado que cuando González solicitó ser acogido en la residencia del embajador "tuvo la garantía de que podía verse o realizar las gestiones que decidiera hacer en relación a su situación". Es ahí donde Exteriores enmarca el encuentro del opositor venezolano con la vicepresidenta del país, Delcy Rodríguez, y el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez.
Las polémicas declaraciones del responsable internacional del PP se producen justo el día en que el Parlamento Europeo ha votado una resolución liderada por la delegación española de los populares en la que se ha reconocido a Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela, un texto en el que solicita que los crímenes del régimen de Maduro sean tenidos en cuenta por la Corte Penal Internacional. Pons manifestó su confianza de que la propuesta salga adelante por las "fugas de votos" en las filas de otros grupos de la Eurocámara.
FAES, la fundación dirigida por el expresidente popular José María Aznar, también ha salido al paso y ha pedido la dimisión del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, al que acusa de haber puesto "mesa y mantel" para "coaccionar" a Edmundo González. "Es tan inaudito como escandaloso que el escenario en que tuvo lugar semejante atropello –documentado con intención difamatoria– haya sido la embajada de España en Caracas", ha criticado en un comunicado, en el que asegura que "Albares debería dimitir ofreciendo excusas, si conservase todavía un átomo de dignidad".
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