En los últimos años, el concepto de permacrisis se ha vuelto cada vez más recurrente, pero aun así hay muchas personas que desconocen su significado y cómo puede llegar a afectarles.
Hoy en día la situación económica en España ha provocado que se hayan comenzado a utilizar términos que hasta hace muy poco tiempo eran poco frecuentes, siendo uno de ellos el de permacrisis, un concepto que, no obstante, se ha hecho cada vez más recurrente en los últimos años. Pese a que cada vez es más mencionado, muchas personas desconocen su significado y la forma en la que puede afectarles.
Para poder entender bien en qué consiste, conviene saber que este concepto está vinculado con la presencia de una crisis económica constante, la cual provoca distintos cambios estructurales irreversibles que tienen influencia en toda la sociedad, hasta el punto de configurarse como un estado de permanencia. Esta configuración es un fenómeno que ya ha tenido lugar en varias etapas a lo largo de la historia.
Por lo tanto, no se debe considerar una crisis coyuntural, sino que tiene la consideración de estado crónico, al provocar cambios importantes en la sociedad y la economía, afectando de forma directa a la calidad de vida de los ciudadanos.
Las causas de que se produzca una permacrisis son varias, debiéndose, entre otros factores, a una falta de crecimiento económico, un bajo incremento de la productividad y una elevada competencia a nivel mundial. Además, al mismo tiempo, estos afectan al empleo, la inflación y el comercio, lo que no deja de poner más trabas a que se pueda dar una recuperación económica, entrando en una especie de círculo vicioso que puede tener consecuencias devastadoras para la economía.
Cómo afecta la permacrisis a la economía
Las consecuencias económicas de encontrarse en una permacrisis son de alta gravedad y tienen un impacto a largo plazo, pues en este tipo de situaciones los estados que las sufren suelen tener que lidiar con grandes limitaciones fiscales, una falta de crecimiento y procesos inflacionarios altos que persisten en el tiempo.
Todo ello deriva en un impacto muy negativo en la propia economía personal de los ciudadanos, que de esta forma ven mermadas sus posibilidades de ahorro y de inversión. Esto se debe a que, en lugar de poder apostar por este tipo de decisiones financieras, en su lugar, tendrán que destinar un mayor porcentaje de sus ingresos, e incluso la totalidad de los mismos, para poder enfrentarse a las necesidades básicas y sus obligaciones de pago.
Este es un fenómeno que tiene un gran impacto en la economía a nivel mundial, ocasionando una desaceleración en el crecimiento económico, dado que impide que se puedan crear nuevos puestos de trabajo, pero también porque dificulta en gran medida que se puedan crear e impulsar nuevos negocios. De igual modo, los propios ciudadanos se ven afectados de forma notable, pues es habitual que los salarios se estanquen y los precios no dejen de aumentar, derivando incluso en que muchos de ellos se vean obligados a endeudarse para poder sobrevivir.
La permacrisis es, por lo tanto, un estado económico que genera una gran preocupación por las implicaciones que tiene tanto a medio como a largo plazo, puesto que cuánto más se extienda esta situación, menores posibilidades de crecimiento económico habrá para quien lo sufra, pero además afectará al resto del mundo.
Es por ello por lo que, en el momento que se detecta, los gobiernos tienen que tomar medidas de forma inmediata para así apostar por la inversión en sectores que permitan un crecimiento económico y la creación de nuevos empleos, antes de que sea demasiado tarde para una recuperación económica.
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