No se habla mucho del catálogo de goles que tiene cada equipo de fútbol. Se estudia desde el análisis y la estadística, pero no se trabaja en base a las formas en las que se obtienen los goles y esto puede ser un hecho determinante para este deporte.
No se habla mucho del catálogo de goles que tiene cada equipo de fútbol. Se estudia desde el análisis y la estadística, pero no se trabaja en base a las formas en las que se obtienen los goles y esto puede ser un hecho determinante para este deporte. Parece sencillo a simple vista: si sabes cómo metes los goles puedes potenciarlo. Si sabes cómo otro equipo lo hace, puedes contrarrestarlo.
Hay alguna charla de Marcelo Bielsa que se acerca un poco a esta idea, pero no es lo mismo. También tiene un libro titulado Los once caminos hacia el gol que ronda esta idea, pero no la aborda directamente. El fútbol está muy centrado en el control, el pase, la posición defensiva, el GPS, la dinámica, el mano a mano y el tercer hombre. Pero si uno analiza los equipos que más títulos ganan y se dedica a pensar en el modo en que consiguen los goles, se pueden entender muchos de los resultados del fútbol moderno.
Uno de los motivos de éxito del Real Madrid, sobre todo en competición europea, es su amplísimo catálogo de goles. Este equipo no necesita que siempre haya buen juego o una serie de cinco o seis aciertos de sus jugadores para lograr el gol porque tiene un abanico muy grande de formas de lograrlo. Juego estático, balón parado, robo, contraataque, balón largo, disparo lejano, segunda jugada, centro al área, ruptura al espacio, penalti y muchas otras situaciones.
La Eurocopa es un ejemplo excelente para repasar el catálogo de goles de cada selección.
Por el contrario, los equipos que practican un fútbol posicional por vocación, para entendernos, los equipos del estilo Guardiola, tienen, quizá, una limitación en su catálogo ya que el gol viene, casi siempre, después de una jugada muy elaborada que pasa por la mente del entrenador. Rara vez el técnico deja que el jugador agite la coctelera y ocurra algo raro. Tanta intervención puede no ser buena en el resultado final, aunque aparentemente mejore el juego.
La Eurocopa es un ejemplo excelente para repasar el catálogo de goles de cada selección. Existe también un catálogo histórico, una especie de imaginario colectivo de cómo fabrica los goles cada una de las selecciones. Eso es, entre otras cosas, el estilo. Es una idea simple, pero puede ser revolucionaria. Analizar y trabajar en base al catálogo de goles de un equipo puede llevarte a tomar muy buenas decisiones.
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